El Juzgado de Instrucción número 1 de Sevilla ha citado a declarar a la última de las alrededor de 30 mujeres que fueron grabadas en el cuarto de baño de una peluquería por medio de una cámara de vídeo que había sido instalada supuestamente por el propietario del local, y que se encuentra imputado por estos hechos ya que las supuestas grabaciones se habrían realizado sin contar con el consentimiento de las víctimas.

En este sentido, fuentes del caso han informado a Europa Press de que la juez instructora ha citado a declarar el próximo día 30 de noviembre a esta mujer, que forma parte del grupo de alrededor de 30 mujeres afectadas, entre ellas varias menores de edad, que ya acudieron a declarar el pasado mes de julio y ratificaron lo dicho anteriormente en sede policial.

De este modo, las afectadas señalaron entonces que "desconocían la existencia" de la cámara de vídeo y que, "por tanto, no dieron su consentimiento para ser grabadas". Asimismo, solicitaron ser indemnizadas por estos hechos, ya que algunas de ellas han precisado incluso de tratamiento psicológico a raíz de conocer que fueron captadas por una videocámara en el cuarto de baño de este establecimiento.

Asimismo, las fuentes consultadas por Europa Press han subrayado que el peluquero imputado por instalar supuestamente una cámara de vídeo en el cuarto de baño de su establecimiento, ubicado en la Avenida de Miraflores de la capital hispalense, también grabó con la referida videocámara a cuatro mujeres pertenecientes a su propia familia, concretamente dos de sus cuñadas y dos sobrinas, una de ellas menor de edad, aunque ninguna de ellas ha presentado denuncia contra el imputado por estos hechos.

Los hechos

Conviene recordar que fue a finales del pasado año 2009 cuando una trabajadora de la peluquería, ubicada en la capital hispalense, descubrió esta videocámara oculta entre una serie de botes existentes en el cuarto de baño, por lo que decidió interponer una denuncia. De esta manera, la Policía obtuvo una orden judicial para proceder a la entrada y registro de la peluquería, encontrando en el ordenador del peluquero imágenes grabadas por la videocámara en el cuarto de baño del local.

La Policía también halló algunas de estas imágenes en el propio domicilio del imputado, añadiendo que las imágenes "contaban con comentarios" sobre las personas que habían sido grabadas en el cuarto de baño de la peluquería. Hasta 20 de las afectadas están siendo representadas por la asociación de Mujeres Víctimas de Agresiones Sexuales (Amuvi).