El portavoz del PP en el Ayuntamiento de Córdoba, José Antonio Nieto, ha exigido al gobierno municipal (IU-PSOE) "que se persone en las actuaciones (del caso Torreblanca) como acusación particular", pues el Consistorio "ha resultado perjudicado por la mala actuación que se ha podido llevar a cabo por algunos agentes" de la Policía Local.

En declaraciones a los periodistas, el también candidato del PP a la Alcaldía de Córdoba para las municipales de 2011 ha explicado que su grupo seguirá demandando "que se aclare lo ocurrido y evitar que vuelva a suceder", a la vez que "hay que colaborar con la Justicia hasta el límite que permita la actuación administrativa", después de que la juez que instruye el procedimiento ha determinado que existen claros indicios de delito por los policías locales imputados.

A juicio de Nieto, con este caso "el buen nombre y el honor del Ayuntamiento está en cuestión", de ahí que sea precisa su personación en el procedimiento, aunque será la Justicia "la que tendrá que decidir si son o culpables" los agentes imputados, "pero lo que no puede hacer el Ayuntamiento es tapar responsabilidades, ocultar asuntos que pueden ser muy graves y ponerse de parte de quienes, como mínimo, han tenido una actitud negligente en todo este proceso".

En concreto, ha sido la titular del Juzgado de Instrucción número siete de Córdoba la que ha dictado un auto por el que convierte las diligencias previas que abrió en un procedimiento abreviado. Es decir, por un lado, dispone la continuación de la causa penal, al considerar que existen claros indicios de delito y, por otro, que los cuatro agentes imputados podrían ser juzgados.

A los policías locales se les imputa un delito de falsedad en documento oficial y otro de infidelidad en la custodia de documentos, según ha corroborado el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).

Los encausados son un matrimonio de policías locales de la Línea Verde que levantaron sin licencia un chalé de dos plantas con porche, y dos agentes pertenecientes al mismo servicio, cuyo cometido era dar parte de las infracciones urbanísticas que se cometían en la urbanización de Torreblanca. La pareja que se levantó la casa formaba parte de la unidad de Disciplina Urbanística de la Policía Local, que se dedica a tramitar o poner denuncias en dicho ámbito.

Tanto los boletines que pesaban sobre la casa de la pareja de efectivos, como el del inmueble de un escolta de la ex alcaldesa, Rosa Aguilar, actual ministra de Medio Ambiente, Rural y Marino, fueron supuestamente manipulados y cambiadas las fechas de las denuncias.