La madrileña es la región española con más universidades, con 15 centros. Cuando acaban el instituto, estudiantes de toda España llegan a la comunidad para seguir formándose. Y eso se nota: el 34,6% de los adultos que residen en Madrid tienen estudios superiores, es decir, son universitarios o han cursado formación profesional, según la Encuesta de Condiciones de Vida publicada por el Instituto Nacional de Estadística. En total, 1,8 millones de madrileños tienen una elevada preparación académica.

Este dato convierte a Madrid en la segunda autonomía con los habitantes más preparados, sólo superada por el País Vasco. Allí han alcanzado los estudios superiores el 39,2% de los adultos, es decir, 713.000 personas. A continuación de vascos y madrileños están los navarros, con un 33,9% de titulados universitarios y en FP. Mientras, los peor formados son los murcianos (sólo un 16,5% de personas con estudios superiores), los extremeños (17,6%) y los manchegos (18,8%). La media nacional es del 24,7%.

Sin embargo, entre la población madrileña hay una gran bolsa de analfabetos o de personas con educación mínima. Un 21,2% de los habitantes de la región carecen de estudios o sólo han alcanzado la Educación Primaria, según el INE. En total, son 1,1 millones de madrileños que disponen, como máximo, de graduado escolar. En este aspecto, Madrid es la tercera región con menor porcentaje, sólo por detrás del País Vasco (17,8%) y Cantabria (15,6%). Mientras, el mayor número de analfabetos funcionales está en Galicia (40%) y Castilla-La Mancha (36,6%). La media de España está en el 30,1%.

Pese al nivel de preparación, en los últimos años ha aumentado el número de analfabetos, sobre todo por la llegada de inmigrantes. En 2004, la misma encuesta del INE, arrojaba un porcentaje de 15,4% de adultos con formación básica.

Menos dinero para universidades

Las universidades madrileñas están entre los muchos perjudicados por el recorte presupuestario aprobado por Esperanza Aguirre para 2011. En concreto, los campus de la región recibirán 1.036 millones de euros, es decir, 13 millones de euros menos que en 2010. Esto supone una ligera reducción del 1,2%. Sin embargo, este recorte se añade a una larga lista de deudas de la Comunidad con las universidades, que ha obligado a los centros a reducir servicios, horarios y actividades extracurriculares.