El centro, por su parte, ha enviado a la delegación de Educación un informe pormenorizado en el que niega la existencia del supuesto acoso y en el que afirma que los inodoros del instituto carecen de tapadera. Educación, sin embargo, ha preferido trasladar al menor mientras se aclaran los hechos y ha solicitado una ampliación del informe.

La titular del área, Carmen García Raya, ha explicado que «en ocasiones las denuncias por acoso escolar no son tales y lo único que consiguen es desacreditar al centro y a los profesores».

El año pasado Educación recibió cinco denuncias de acoso que están siendo estudiadas. Las últimas ocurridas en noviembre en los institutos de Peligros y Guadahortuna.

La asociación SOS Bullying considera que la decisión de trasladar a la supuesta víctima «es incorrecta, ya que además de ser humillado es castigado por un hecho del que no tiene culpa».