Un empresario ovetense se sentará el próximo miércoles, día 10, en el banquillo del Juzgado de lo Penal número 2 de Oviedo, acusado de un delito contra los derechos de los trabajadores por permitir a dos operarios arreglar el tejado de un edificio de siete alturas "sin ningún tipo de medidas de protección". El hombre se enfrenta a un año de cárcel y a una multa de 7.200 euros.

De acuerdo al relato de los hechos de la Fiscalía, los trabajos fueron paralizados por la Inspección de Trabajo, cuando comprobó que dos obreros de la sociedad Lombardía y Muñoz realizaban labores de impermeabilización del tejado "sin medidas de protección ni individuales ni colectivas", ubicado en el número 3 de la calle Palmira Villa.

Según estas fuentes, al acusado le correspondía, como mando directo de sus trabajadores, la adopción de las medidas que garantizaran la seguridad de sus empleados y permitió, sin embargo, que realizaran sus tareas con el conocimiento de la carencia de aquellas.

Para el fiscal, los hechos infringen varias normativas relativas a la prevención de riesgos laborales, por lo que interesa además que se le inhabilite para el ejercicio de la profesión durante el tiempo de la condena.