La fusión de Telecinco y Cuatro ha superado uno de sus escollos más importantes después de que el Consejo de la Comisión Nacional de la Competencia (CNC) autorizara este viernes la operación de concentración. Sin embargo, la CNC ha indicado que la autorización está sujeta a que Telecinco cumpla una serie de compromisos que "solucionan los problemas de competencia detectados".

El 28 de abril de 2010 Telecinco notificó ante la CNC su proyecto de adquisición de Cuatro. El día 29, Prisa, Telefónica y Telecinco notificaron su proyecto de adquisición del control conjunto de Digital +.

Dos meses después, el Consejo de la CNC identificó algunos de los problemas que, a su entender, generaría la fusión. Por ejemplo, advirtió de que la comercialización de la publicidad forma conjunta por ambas cadenas podría convertirlas en imprescindibles para los anunciantes, ya que entre las dos reúnen un gran volumen de audiencia.

Además, la fusión reforzaría su poder negociador de cara a la compra de contenidos, lo que afectaría a los competidores televisivos de Telecinco y a los proveedores de contenidos más pequeños.

La CNC también destacó que estos problemas se agravarían si Telecinco adquiriese la condición de accionista de control de Digital +, ya que podría utilizar su presencia simultánea en los mercados televisivos de pago y televisión en abierto para acaparar contenidos audiovisuales.

Sin embargo, al parecer los compromisos que ha presentado Telecinco para subsanar estos problemas han resultado "adecuados" por la CNC, que ha dado su visto bueno. Entre otras cosas, Telecinco se ha comprometido a limitar su autonomía comercial a la hora de gestionar publicidad televisiva o adquirir contenidos audiovisuales.

Obligaciones de Telecinco

Así, Telecinco no podrá vender mediante un mismo paquete comercial la publicidad de los dos canales de televisión y tendrá que respetar la condición adicional de que la audiencia conjunta de los canales de televisión incluidos en cada paquete comercial no sea superior a 22%. Tampoco podrá desarrollar políticas de venta vinculadas a los anunciantes de sus distintos paquetes comerciales de publicidad televisiva.

En cuanto a la oferta televisiva, Telecinco no podrá ampliar su oferta de canales de televisión en abierto mediante el arrendamiento de canales a otros operadores. También limitará la duración de sus contratos de adquisión exclusiva de contenidos a tres años, sin incluir derechos de adquisición preferente a prórroga.

Mientras, algunas voces han mostrado su rechazo a la operación de concentración. Por ejemplo, el consejero delegado de la Sexta, José Miguel Contreras, para quien la fusión es  una "amenaza" de cara la competencia poque transformaría a Telecinco y Cuatro en"una potencia y una capacidad inexistente en casi ningún país del mundo".

Ahora el expediente sigue el trámite.