Cerca de doscientos estudiantes de la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Complutense han recibido con abucheos y pitidos a la líder de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), Rosa Díez, a su llegada al campus universitario para pronunciar una conferencia, donde además se ha encontrado pancartas rechazando su presencia y con lemas como 'Víctima profesional, asesina legal'.

Rosa Díez ya se enfrentó a un episodio similar la primera vez que acudió a esta facultad en febrero de 2008, aunque entonces la presión de los estudiantes hizo que tuviera que anular la conferencia. Además, el pasado año el anuncio de los de los estudiantes de repetir las protestas le hizo anular otra convocatoria.

En esta ocasión, la diputada de UPyD sí que ha podido pronunciar la conferencia, aunque ha tenido que entrar en la Facultad rodeada de sus escoltas y personal de seguridad y ante los pitidos de los estudiantes. Además, antes de su intervención, el decano del centro, Heriberto Cairo, ha permitido a los estudiantes leer un manifiesto de protesta, lo que no ha sido visto con buenos ojos por el partido.

Según han indicado fuentes de la formación, Rosa Díez no sabía que se permitiría a los estudiantes leer sus protestas antes incluso de que ella interviniera y ha tenido que soportar "palabras insultantes". Mientras los estudiantes leían su manifiesto, la diputada se ha mantenido con la mirada al frente y semblante serio.

El texto de protesta ha calificado la presencia de Rosa Díez en la universidad como "despreciable, clientelar y oportunista". "A los oportunistas como usted les sacamos tarjeta roja", ha enfatizado uno de los estudiantes a la vez que todos sus compañeros elevaban tarjetas rojas antes de abandonar el salón al grito de 'Rosa Díez, no eres bienvenida'.

Pitidos y bombas fétidas

Sin embargo, las protestas no han terminado ahí y se han repetido durante toda la intervención de la diputada, aunque ya con pitidos más tímidos. En el turno de preguntas es cuando el rechazo a Rosa Díez ha vuelto a cobrar protagonismo e incluso una alarma de incendios ha impedido que se siguiera hablando en continuadas ocasiones. Las bombas fétidas arrojadas por toda la sala desprendían además un fuerte mal olor.

"La vida me ha enseñado que no puedes agachar la cabeza ante los intolerantes", ha respondido la diputada antes de criticar la decisión de permitir la lectura del manifiesto. "No hay que pagar por la paz, si cedes al chantaje es difícil recuperar el camino de la libertad", aseguró.

Algunas de las protestas reprochaban además a la líder de UPyD haber calificado al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, como gallego "en el sentido más despectivo del término". Además, aunque un estudiante le ha pedido una rectificación pública de estas palabras, ella no se ha referido al asunto. En su discurso Rosa Díez ha desgranado las principales propuestas e ideas de UPyD sobre regeneración democrática y ha expuesto los asuntos que han protagonizado su trabajo como diputada durante los dos últimos años.