El irlandés Bob Carlos Clarke goza de una reputación labrada a base de constancia. Nacido en 1950, a los 25 años completó un máster de fotografía en el Royal College of Art. En el campo de la publicidad, sus instantáneas han ilustrado las campañas de firmas como Smirnoff y Volkswagen. También es uno de los fotógrafos de moda más demandados por las grandes marcas. Sus retratos emanan sensualidad y elegancia a partes iguales.
En la exposición Love Dolls Never Die (Las muñecas del amor nunca mueren), Bob Carlos Clarke mezcla arte y sexo y crea un cóctel provocativo de imágenes. Todas ellas recogidas en el libro del mismo nombre en el que muestra el voyeurismo en estado puro con mujeres esculturales envueltas en látex, objetos cotidianos convertidos en material fetichista...
La muestra se podrá visitar hasta el próximo 14 de marzo en la galería Picasso Mio.
* Lagasca, 11-1º B. De 10.00 a 20.30 horas. Entrada libre.
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