Representantes de la industria auxiliar naval de Sevilla criticaron la actitud de "oscurantismo" y "secretismo" con el que las distintas administraciones están llevando el tema de la posible venta del astillero a distintos grupos empresariales, hecho éste que, a su juicio, "inquieta e influye muy negativamente en la posibilidad de que la actividad no se interrumpa".

En un comunicado, los empresarios sevillanos de la industria auxiliar naval y la Federación de Empresarios del Metal de Sevilla (Fedeme), consideran "urgente" una reunión con la Junta de Andalucía para "hacerle llegar directamente su propuesta de continuidad de la actividad del astillero, al mismo tiempo que se acaba con ese oscurantismo y ocultación de datos con que se está llevando a cabo este tema, sobre todo desde el Gobierno central".

Los empresarios están dispuestos a dar "un paso más y asumir la gestión de astilleros con el compromiso de acabar los barcos actuales, con lo que se generaría 1.500 puestos de trabajo directos y 5.000 indirectos, al mismo tiempo que plantearían un plan de negocio que incluyera la continuidad de los astilleros en el futuro".

Éste es el planteamiento que quieren hacer tanto a la Junta de Andalucía como al Ministerio de Industria, "de cuyas conversaciones a nadie informan y, sobre todo, ponen en duda la forma en que el proceso se está llevando a cabo".

La industria auxiliar naval sevillana lleva desde el mes de enero de 2009 sufriendo retrasos en los pagos, devoluciones de efectos o retrasos en la facturación, lo que se traduce en una pérdida de casi 1.300 empleos directos y están en el aire casi 26 millones de euros.

El planteamiento de las empresas auxiliares pasa por "demostrar cómo, con una buena gestión empresarial, los astilleros sevillanos hubiesen sido y serían totalmente viable y rentable, pudiendo haber llegado a un cierre del ejercicio positivo en condiciones normales y con la carga de trabajo existente".