La Asociación Cántabra de la Automoción (ASCAUTO), integrada en PYMETAL, ha solicitado a la Administración nuevos programas de financiación para poder hacer frente a la crisis que afecta al sector que, tras el cese del Plan 2000E, ha provocado una caída de las ventas superior al 50 por ciento.

El presidente de ASCAUTO, Tomás Parte, ha solicitado la colaboración de la Administración para poder afrontar una crisis "sin precedentes" en uno de los sectores "estratégicos" para la economía cántabra, y que actualmente emplea a 3.500 trabajadores.

Para Parte, de no hallarse una solución, se pondrán en peligro "miles" de puestos de trabajo, ya que los concesionarios cántabros (la mayoría de ellos pymes) no pueden asumir la caída de las ventas. Según las últimas estadísticas, referentes al mes de agosto, en Cantabria se vendieron 757 vehículos (motos, furgonetas, camiones y turismos). Apenas seis meses antes (marzo), en plena vigencia del Plan 2000E, las ventas superaron los 1.580 vehículos.

Según Parte, la caída registrada en el mercado automovilístico responde, por un lado, a la finalización del Plan 2000E, que incentivó las ventas y con ello la renovación del parque, y por otro, a la subida del IVA el pasado mes de julio, que "disuadió a muchos compradores". De hecho, según las estadísticas oficiales, junio fue uno de los meses de mayores ventas del año en toda clase de vehículos (1.663).

Ante estas circunstancias, ASCAUTO solicitará una reunión con la Administración competente para estudiar nuevas ayudas, ya que un repunte de las ventas "no sólo beneficia al sector, sino que repercute positivamente en la Administración, que aumenta, vía impuestos, su recaudación", afirma.