El vicerrector de Investigación y Política Científica y director del Parque Científico de la Universidad de Valladolid (UVA), Luis Miguel Nieto, aseguró que su Departamento "repensará" el modelo de evaluación de la actividad investigadora del profesorado doctor ante la "baja" productividad científica derivada de una "insuficiente tarea de calidad".

En la actualidad, el director de Impulso y Coordinación de la Investigación, José Manuel López, trabaja en hacer análisis propios para ver cuáles son los niveles de publicación de la UVA ya que, según señaló el vicerrector, hay grupos reconocidos en el centro con un importante grueso de publicaciones en revistas de calidad pero otros muchos doctores que no realizan actividad investigadora alguna.

"Existen estándares internacionales reconocibles y a eso nos vamos a atener, uno de mis objetivos es analizar cuál es la situación real y buscar medidas concretas para que estos profesores que no hacen labor investigadora se enganchen con grupos de cierto nivel que puedan tirar de ellos", expresó Nieto, quien confía en que a cuatro años vista haya un porcentaje "notable" que haga investigación y de calidad.

Para Nieto, resulta "doloroso" ver cómo en parámetros básicos la UVA se sitúa a la cola en el ranking de universidades públicas españolas. En 2009, de los 48 centros del país, la Institución vallisoletana se encontraba en el puesto 38 en el ranking por artículos, en el 30 en tramos de investigación, en el 39 por proyectos de I+D, el 41 por tesis doctorales, el 31 por becas FPU y el 35 por doctorados con mención de calidad.

"Si se analizan las diferentes clasificaciones de las universidades y se tiene en cuenta cómo queda la UVA, un vicerrector medianamente responsable no puede quedar satisfecho. Podría lanzar flores a mi Institución pero una dosis de autocrítica es buena para salir de donde está y ser mejor", agregó.

Por ello, Nieto cree que es necesario reformular cómo se evalúa esta actividad ya que el método que se utiliza actualmente, de carácter anual, tiene en cuenta "demasiadas cosas que no son de suficiente calidad".

"Hay un cierto sentimiento de que la manera de medirlo no es la correcta, hay que plantearse qué hay que valorar y qué, siendo valorable, no es tan relevante pues no es lo mismo conseguir un proyecto europeo que un artículo que se firma con una empresa donde no hay exigencia de calidad", manifestó.

La UVA se dotó de este sistema interno de calificación hace años, en el primer mandato del rector Jesús María Sanz Serna. A través de la medición de parámetros como el numero de artículos publicados, la asistencia a congresos o los premios conseguidos, los profesores doctores obtienen cada año una valoración numérica entre 0 y 20.

Sistema "desfasado y truncado"

No obstante, el vicerrector insiste en que el sistema está "desfasado" y de que es "inadecuado" porque existen "truncaciones internas" que limitan poder conseguir puntuaciones mayores en cada uno de los apartados. "Este prisma no evalúa correctamente porque no da un número real, internamente da una nota alta pero es ficticia porque no está hecha con parámetros reconocidos a nivel nacional e internacional", destacó.

"No podemos regirnos por cuántos artículos se han publicado en un periódico local", replicó, al tiempo que reconoció que, una vez reformulado el sistema, no teme obtener una calificación peor a la esperada.

"No hay que tener miedo a la verdad, lo importante es saber dónde estamos e intentar mejorar", apuntó.

A pesar de todo, Nieto confía en que la savia joven que entra a la universidad, "con otra cultura y más dinámica", hará girar el rumbo, y se mostró satisfecho por que la ley exija requisitos externos mínimos para ser evaluado positivamente. "Es una buena medida que incentiva que para hacer carrera universitaria hay que investigar. Por ley la actividad del profesorado no es sólo docente, realmente necesita una labor investigadora, es su obligación", apostilló.

Así, el reto del vicerrector a partir de ahora es, según garantizó, que el cien por cien de sus compañeros doctores realicen tareas de nivel al final de estos cuatro años de ejercicio al frente de Investigación y Política Científica. "Eso es una utopía pero habría que aspirar al menos al 80 por ciento", zanjó.