Un total de 2.000 ciudadanos de Baleares podrán ser designados para formar parte de un tribunal del jurado en los procesos que sean juzgados mediante esta fórmula durante los próximos dos años, según ha explicado el presidente de la Audiencia Provincial de Palma, Carlos Gómez, quien ha presidido junto al delegado provincial del Censo Electoral, Joan Pons Ordinas, el sorteo de candidatos para integrar los tribunales del jurado entre 2011 y 2012.

El proceso, que se ha llevado a cabo en una de las salas de la instancia judicial, se ha celebrado mediante un sistema informático, a través de un programa de selección de arranque aleatorio basado en el censo electoral de residentes de las islas y a partir de un número aleatorio que ha sido el 141,31371. La cifra se ha visto reducida considerablemente respecto a las 3.000 que en años anteriores resultaban elegidas en base a la media de juicios con jurado celebrados con anterioridad.

La lista resultante será publicada próximamente en el Boletín Oficial de las Illes Balears (BOIB) y, además, los afectados recibirán una carta informándoles de que resultaron elegidos. No obstante, la lista definitiva de candidatos se dará a conocer en diciembre, ya que una vez elegidos los 2.000 ciudadanos, esta lista quedará previsiblemente reducida debido a las posibles incompatibilidades o exenciones de los candidatos.

Ya en cada uno de los juicios que se celebren, serán seleccionados 36 candidatos a formar parte del tribunal, de los que quedarán 20 que irán a la vista. Sin embargo, serán finalmente 11 los jurados que queden, de los que nueve deberán estar presentes en el juicio y dos restarán como suplentes.

Cabe señalar que el tribunal del jurado tiene como función emitir el veredicto en los juicios por delitos de homicidio, amenazas, omisión del deber del socorro, allanamiento de morada, incendios forestales y aquellos cometidos por los funcionarios en el ejercicio de sus cargos. Mientras tanto, es el presidente del tribunal el que decide, tras el juicio, sobre la absolución del acusado o su condena, y en este caso sobre las penas a imponer.