El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha asegurado este miércoles que no tendrá "ningún inconveniente" en recibir al alcalde de Santander, Iñigo de la Serna, tras la presentación de los Presupuestos de la Comunidad Autónoma para el próximo año y que "probablemente" se recortarán "un 12 por ciento" en relación al presente ejercicio, ya que los ingresos también han "bajado de manera considerable".

"Cuando presente los Presupuestos, si él quiere venir a verme, pues le recibo encantado", ha manifestado Revilla, quien ha explicado que ha enviado una carta al regidor de la capital en la que le dice que en cuanto se presente la Ley en el Parlamento no tendrá "ningún inconveniente en recibirle".

El jefe del Ejecutivo autonómico ha respondido así a preguntas de los periodistas en La Bien Aparecida a propósito de la solicitud de De la Serna de reunirse con él.

Revilla ha señalado no obstante que "seis veces" ha tenido ya la "experiencia" de que los encuentros con el alcalde son "siempre la misma historia", ya que desde el equipo de Gobierno del Ayuntamiento (PP) "mantienen la tesis de que el presidente de Cantabria sólo se fija en los pueblos y que es un enemigo de Santander". "De eso nada", ha sentenciado.

En este sentido, ha recordado que hace seis meses el Gobierno dio a conocer las inversiones realizadas en Santander, que son "importantísimas", y ha asegurado que si "no hay marginación para nadie", menos para "una ciudad que es la capital de Cantabria".

Apretarse el cinturón

Tras indicar que al alcalde "le parecerá poco" la inversión en Santander, Revilla ha recalcado que "los recursos son los que son" y que este año, además, "hay que apretarse el cinturón".

Así, "probablemente" los Presupuestos de la Comunidad para 2011 se recortarán "un 12 por ciento", debido a que los ingresos también han "bajado de manera considerable".

A ello se añade que "hay que hacer un reparto equitativo", ya que si bien la capital es "importantísima" y "maravillosa", "Cantabria es toda" y también "hay que hacer carreteras en los pueblos, consultorios", etcétera.

"Hay que repartir los recursos públicos para que ningún ciudadano de la región se considere marginado", ha concluido Miguel Ángel Revilla.