Un joven de unos 23 años se ha prendido fuego esta mañana en plena calle junto a los juzgados de guardia de Sevilla, después de rociarse con un líquido inflamable y prenderse con un cigarro, tras lo que fue trasladado urgentemente a un hospital con quemaduras que afectan al 80% de su cuerpo. El joven, dijo a quienes le socorrieron que tenía numerosos problemas personales, que estaba "amargado" y que le habían "destrozado la vida".

Los hechos han ocurrido sobre las 10.45 horas cuando se roció con un líquido inflamable y se prendió fuego a la altura de la cadera, tras lo que corrió "unos treinta metros" hasta ser interceptado en la puerta del juzgado de guardia, según han informado testigos del suceso.

El herido, cuya identidad no se ha facilitado, se encuentra "bastante grave" en la Unidad de Quemados del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla y se prendió fuego tras llegar "andando" a los juzgados de guardia por la céntrica avenida Menéndez y Pelayo, según han precisado fuentes del Cecop del Ayuntamiento. Tras llegar a ese lugar, el joven extrajo de una maleta un cigarro y una botella con un líquido inflamable, que se roció por el cuerpo y seguidamente encendió el cigarrillo y se prendió fuego.

Las fuentes han explicado que los primeros que acudieron a auxiliar al joven fueron policías nacionales y guardias civiles que se encuentran de guardia en la zona de los juzgados, que le arrojaron encima unas mantas para sofocar las llamas, aunque no pudieron evitar que el hombre sufriera quemaduras que le afectan al 80% del cuerpo. Según las fuentes, al parecer ya había intentado en una anterior ocasión quitarse la vida, sin que hayan trascendido más detalles de por qué se prendió fuego.

Una vez alertados por el 112, los servicios de emergencias sanitarias del 061 trasladaron al joven a la Unidad de Quemados del Virgen del Rocío, sin que por el momento hayan trascendido más detalles sobre su estado. Un ciudadano fue el que llamó al 112 para alertar de que había visto a un joven cómo se prendía fuego en la vía pública.

Además de agentes de la Guardia Civil, la Policía Nacional y la Policía Local, al lugar de los hechos se trasladaron rápidamente efectivos de los Bomberos, de Emergencias Sanitarias 061 y del propio Cecop del Ayuntamiento de Sevilla, según las fuentes. La Policía se ha hecho cargo de la investigación para esclarecer lo ocurrido.