El riesgo de entrar en suspensión de pagos en Andalucía se ha multiplicado por cinco entre 2005 y 2009, de forma que, según este estudio, si en 2005 el porcentaje de riesgo era de 1,68 por cada 10.000 empresas activas, en 2009 dicho porcentaje asciende a 9,68.

Andalucía, con una tasa de 9,68 empresas por cada 10.000, es una de las tres comunidades, junto a Canarias (7,39) y Extremadura (8,93) cuyas sociedades presentan menos riesgo en entrar en suspensión de pagos o procesos concursales, según un estudio elaborado por EAE Business School y consultado por Europa Press, que destacó que Comunidad Valenciana (20,53), Cataluña (20,46) y Murcia (19,34) concentran las tasas de riesgos más elevadas.

Analizando el tamaño de las empresas, el riesgo de concursos en Andalucía para las microempresas es de 4,68 por cada 10.000 empresas, cifra por debajo de la media nacional del 7,55; de 81,42 empresas pequeñas por cada 10.000 —frente a las 121,91 de media—; y 195,05 medianas y grandes empresas por cada 10.000 empresas activas en Andalucía, cifra por encima de la media, cifrada en 170,68.

De esta forma, entre el año 2005 a 2009, el riesgo de entrar en suspensión de pagos en Andalucía se ha multiplicado por cinco, incremento similar e incluso levemente superior a la media nacional, de forma que, según este estudio, si en 2005 el porcentaje era de 1,68 por cada 10.000 empresas activas, en 2009 dicho porcentaje asciende a 9,68.

De esta forma, en 2009, un 9,8 por ciento de las empresas concursadas en España es andaluza.

Según el sector de actividad económica, las empresas del sector de la construcción son las más proclives a sufrir concursos de acreedores, seguida de la industria, el comercio y el resto de servicios.

Datos nacionales

Según este estudio, en España la propensión de las empresas a entrar en un proceso concursal ha crecido un 398 por ciento entre 2005 y 2009, al situarse la tasa de riesgo media en el 15,07 en el último año. Esto es, por cada 10.000 empresas activas, 15 entrarán en concurso de acreedores.

El informe también arroja que las sociedades anónimas están más expuestas a las denuncias de sus acreedores que los autónomos (personas físicas). "El concurso de acreedores sigue siendo una práctica poco común para los autónomos y reducida para las sociedades de responsabilidad limitada", indicó el director del Strategic Research Center de EAE, Mario González.