Un bizcocho con almendras, cubierto de yema tostada y con la imagen de la Puerta de Hierros del Recinto Ferial es el 'Dulce del Centenario' creado por el panadero Jesús Alajarín, de cara a la conmemoración de los 300 años desde que se concedió el título de Feria franca a la feria de esta ciudad.

La concejala de Feria y del III Centenario, Soledad Velasco, ha indicado que, al pasar los días festivos (del 7 al 17 de septiembre), "la receta también estará dentro de ese gran documento que la alcaldesa ha anunciado en más de una vez y que recopilará todos los proyectos realizados con motivo del III Centenario".

Por su parte, Alajarín ha explicado que empezó a plantearse "en serio" cómo participar con un proyecto para esta Feria conmemorativa "hace dos años" y en primer lugar "pensé, como panadero que soy, en que podría hacer algo en ese sentido pero pronto me di cuenta de que un dulce encajaría mejor".

Para ello, "me puso en contacto con Ramón Barea, director de la Escuela Regional de Panadería", a quien le pareció "interesante" el proyecto y decidió colaborar. "Fuimos desechando ideas hasta considerar que lo mejor sería hacer una tarta de almendras que se mantuviera jugosa y, para ello, le hemos dado el toque de la yema tostada", ha explicado. Se culmina con la imagen de la Puerta de Hierros en una oblea sobre la yema.

De elaborar este dulce compuesto por huevos, almendra tostada y cruda, mantequilla, miel, raspadura de limón y yema tostada se ha encargado Juan Luis Cano, pastelero de San Clemente (Cuenca), y la comercializará y distribuirá a través de Dulcebazar.

De momento, la acogida está siendo buena porque "ya tenemos varios pedidos en distintas tiendas de alimentación, restaurantes y para varios stands de la Feria", donde podrán degustarla los ciudadanos. En principio, "la idea es venderla a unos 15 euros", pero Alajarín ha reconocido que dependerá de cada comerciante o restaurador.

"Tengo muchísima fe en que este dulce funcione y guste porque yo soy probador de todo", ha dicho el impulsor del proyecto, que ha defendido que, además, "se puede comer a cualquier hora del día" y que "aguanta, por lo menos, ocho o 10 días".