Lo anecdótico es que hasta el día 31 de diciembre, el pasado año era el segundo más seco del último medio siglo y sólo las lluvias caídas en ese día (1,8 l/m2) permitieron recoger algo más de agua que en 1957. Hay que tener en cuenta que en sólo dos meses, entre octubre (fue el tercero más lluvioso de los últimos 45 años) y noviembre se recogió más de la mitad de la lluvia del año.

Los años cuarenta y cincuenta fueron muy secos: Si comparásemos el agua que ha llovido en 2005 con la caída en esas dos décadas veríamos que en los cuarenta hubo tres años más secos que este último, mientras que en los cincuenta encontramos cuatro.

Poco agua embalsada

Además, los tres embalses de la cuenca del Pisuerga que son los que afectan a Valladolid y que se encuentran en las localidades palentinas

de Requejada, Cervera y Aguilar de Campoo tienen acumulados 68,3 hectómetros cúbicos, casi la mitad (44,66%) que hace un año, cuando había 123,4 hm3.

La buena noticia es que en las últimas semanas está entrando más agua de la que se gasta. Así, en Aguilar, donde se halla el más grande de los tres pantanos, entran 4,6 m3/seg y salen para consumo 3,2. En la actualidad, tiene almacenados 44,7 hectómetros cúbicos.