Iberdrola ha revisado más de 20.400 kilómetros de sus líneas eléctricas de la Comunitat Valenciana durante este ejercicio para reforzar la seguridad del suministro durante este verano. Además, ha analizado más de 14.816 kilómetros de líneas en territorio valenciano de manera "extraordinaria", ha asegurado la compañía en un comunicado.

En este sentido, ha explicado que se ha desarrollado esta iniciativa sobre todo en las instalaciones con más riesgo de sufrir incidencias por las puntas de demanda o las inclemencias meteorológicas habituales durante esta época del año debido a las elevadas temperaturas veraniegas.

La empresa ha realizado una revisión ordinaria de aproximadamente 5.561 kilómetros de tendidos eléctricos orientada a detectar las anomalías más habituales en una instalación de estas características: rotura de aisladores, los daños ocasionados por rayos o caída del arbolado, obras en construcción o edificaciones próximas, entre otras causas.

Además, Iberdrola ha analizado más de 14.816 kilómetros de líneas en la Comunitat Valenciana de manera "extraordinaria". Esta iniciativa ha consistido en un "reconocimiento exhaustivo" de los apoyos eléctricos y una revisión termográfica del estado de los conductores, realizada con cámaras especiales a pie de campo o en helicópteros.

Según ha explicado, es la manera de medir la temperatura de las instalaciones, lo que permite detectar aquellos puntos que mantienen temperaturas inadecuadas —puntos calientes— para corregirlos y asegurar el suministro ante una posible punta de demanda.

La compañía ha llevado a cabo también en la Comunitat la comprobación de aproximadamente 25.000 centros de transformación, en los que se ha examinado el correcto funcionamiento de los componentes y las diversas conexiones.

La campaña de revisión de instalaciones eléctricas se enmarca dentro de las labores de mejora y ampliación de la infraestructura de Iberdrola "con el objetivo de seguir mejorando la calidad del suministro de energía".