El presidente del PP-A, Javier Arenas, se ha mostrado convencido de este lunes de que, después de las elecciones municipales de mayo de 2011, se va a producir la "primera crisis importante" en el PSOE-A por los resultados que va a obtener, mientras que ha criticado que, con la que está "cayendo", el debate principal en ese partido sea cómo acabar con las primeras, de las que "tanto presumieron". A su juicio, los actuales dirigentes del PSOE-A, sin duda, están "allanando mucho el camino" al PP-A.

Durante su intervención ante el Comité Ejecutivo Regional del PP-A, Arenas, que ha avanzado algunas de las prioridades del partido para los próximos meses, ha explicado de que septiembre a diciembre se van a dedicar a la "alternativa", sin perder mucho tiempo en "hablar de lo mal que lo hace lo hace el PSOE", sino que estarán centrados en explicar las políticas que pondrán en marcha cuando gobiernen.

Arenas insistió en que los populares representan un cambio "posible y tranquilo" que a nadie le viene mal en Andalucía. A su juicio, el "único miedo que deben tener los andaluces es a que todo siga igual", mientras que el "cambio tranquilo" representa esperanza para todas las mujeres que quieren trabajar y no pueden hacerlo en estos momentos, para los parados y para los pensionistas, según expuso.

Tras manifestar que en este momento en Andalucía "gobierna la mentira", ya que los socialistas no se atreven a explicar a la sociedad qué están haciendo, Arenas se ha mostrado convencido de que en el primer semestre del año ha "cristalizado la mayoría social por el cambio" en Andalucía, ya que la última docena de sondeos que ha salido a la luz pone de manifiesto que la mayoría de los andaluces quiere el cambio y que lo ven en torno al PP-A, según dijo.

En cuanto a las elecciones municipales, que van a centrar buena parte del trabajo del PP-A a partir de septiembre, Javier Arenas mostró su satisfacción por que a diez meses de esos comicios, ya cuenten con unos 600 candidatos designados, mientras que ha confiado en que antes de final de septiembre estén ya todos nombrados.

El hecho de que el PP-A ya tenga tantos candidatos designados pone de manifiesto, según el dirigente popular, la "realidad de un partido de gobierno, frente a un Partido Socialista que está centrado en la suspensión de las primarias, de las que tanto presumieron".

Javier Arenas se ha mostrado convencido, de cara los comicios locales, de que el cambio importante va a venir en los municipios del interior, con un "crecimiento generalizado" del Partido Popular. "Va a ser tan contundente que va a abrir la primera crisis de identidad del PSOE", partido que, según apuntó, siempre ha creído que esas poblaciones del interior "son de su propiedad y no permite que se dé la alternancia".

Tras mostrarse convencido de que el PP-A ganará en las ocho capitales de provincia y de que mantendrá un "hegemonía" en las zonas de las costa, Arenas insistió en que las elecciones municipales van a ser la "antesala del cambio" en Andalucía y España.

Elecciones en cataluña

De otro lado, Javier Arenas indicó que desde el PP-A van a ayudar en todo lo que

puedan a los compañeros populares de Cataluña, con vistas a las elecciones que se celebrarán en esa comunidad, que es la "segunda tierra más andaluza" de España.

Se mostró seguro de que esos comicios van a suponer el paso del PSC a la oposición, mientras que el Partido Popular puede ser "decisivo para garantizar" una Cataluña plural y fuerte en la España común. Para Arenas, la primera "gran crisis" del PSOE va a venir por los resultados electorales en Cataluña.

De cara a principios de 2011, según el dirigente popular, se plantea la posibilidad del anticipo de las elecciones generales. "Sin elecciones, esto no tiene solución ni en España ni en Andalucía porque existe un problema brutal de confianza", sentenció Arenas, para quien Andalucía cuenta con un Gobierno autonómico "más débil que nunca", algo que, según aseguró, Rodríguez Zapatero "lo sabe" y por eso no se acuerda de esta tierra nada más que por Doñana, que es su "única referencia" andaluza.