Los siete campings del término municipal de Tarragona han exigido a la Administración que les tenga en cuenta como sector estratégico para la economía y modifique la normativa para contribuir a que desaparezca la visión del camping como "un destino cutre de bajo presupuesto", según ha exigido el portavoz de esta agrupación local, Joan Antón.

Entre las demandas concretas que han hecho los campings este jueves en rueda de prensa, se encuentra la solicitud de que se modifique un Plan de Ordenación Urbana en Tarragona que consideran "antiguo y desfasado", y se facilite la instalación de bungalows hasta en un 50% de la superficie de acampada, sin consumo de suelo edificable, al igual que sucede en otras localidades más permisivas de la provincia como Salou, Cambrils, Vendrell o Calafell, y en otras comunidades autónomas.

"Es cuestión de que se crean que Tarragona es una ciudad turística y obren en consecuencia", ha demandado Antón, que invitó cambiar la concepción del camping y verlo como "pequeños resorts en la costa que han permitido conservar el litoral; auténticos pueblos que dan servicio, en algunos casos, a más de 3.000 personas".

El portavoz de los campings de Tarragona, una agrupación integrada en la Asociación de Campings de la Costa Daurada, también ha pedido que la nueva normativa permita crecer a estas instalaciones usando parcelas rústicas limítrofes para ofrecer superficies más ajardinadas, zonas deportivas o centros 'spa'.

Los campings de Tarragona ciudad facturan anualmente 12 millones de euros, atraen a 60.000 turistas y ofrecen casi 6.500 plazas, frente a las apenas 2.400 de los hoteles. La ampliación del porcentaje de bungalows se inscribe en una evolución cualitativa de la oferta.

Mejora en las previsiones de ocupación

Antón también se ha referido a las previsiones para la temporada estival, en la que se mantiene la tendencia de reservar a última hora, y para la que los campings prevén una mejora respecto a las cifras de 2009, cuando se registró una caída del 20%.

"Hay más alegría en el gasto de la clientela extranjera", ha manifestado el responsable de la asociación, que también ha mencionado unas condiciones climáticas privilegiadas que pueden contribuir a mejorar la cifra de visitantes.

Ha instado a no avergonzarse del modelo de sol y playa y a trabajar para ofrecer servicios de calidad que permitan plantar cara a otros destinos como la competencia que llega de Turquía, Chipre y Egipto. Ha detallado la necesidad de mejorar la señalización, la recogida de residuos y el transporte público, sobre todo por la noche.

Ha subrayado que los campings de la Costa Daurada están en la "guía Michelín de los campings europeos", es decir, que juegan en la "Champions League" del sector, por lo que lamentó que las conversaciones no sirvan para avanzar en su mejora.