El consejero de Educación de la Junta de Castilla y León, Juan José Mateos, ha asegurado este viernes en una mesa redonda en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo de Santander que el profesorado universitario debe ser el "motor del profundo cambio educativo implícito en la declaración de Bolonia.

Según ha explicado el miembro del Ejecutivo regional en su participación en la mesa redonda 'Los profesores como agentes del cambio educativo: análisis de la eficiencia de su trabajo docente', se debe también imponer esa consideración para una "rigurosa evaluación con consecuencias ya sea en el sistema retributivo o en la carrera docente".

Por ello, el consejero ha abogado por que los presupuestos universitarios incentiven con rigurosidad "tanto los objetivos institucionales como el esfuerzo de los profesores medido por sus resultados".

En su intervención, Mateos ha explicado que el papel del profesor universitario como gestor del aprendizaje de los alumnos le responsabiliza de organizar y planificar el trabajo del alumno "no sólo de forma presencial sino el que desarrollará de modo autónomo". Además, incidió en que se debe considerar la utilización de los recursos de las tecnologías de la información y la comunicación.

Este nuevo modelo de organización docente está basado, ha incidido el consejero, en la transformación profunda del proceso de enseñanza-aprendizaje que sufrirá, ha aventurado, "el cambio más radical que ha de producirse en las aulas universitarias".

Mateos ha destacado la labor de uno de sus compañeros en la mesa, el catedrático de Orientación Educativa en la Universidad de Barcelona, Sebastián Rodríguez Espinar, que presentó los datos de un informe sobre el profesorado del Siglo XXI, ya que alude al "mal diseño de unos estudios, la inadecuada organización docente y la falta de formación del profesorado" como factores de peso del fracaso escolar.

No obstante, ha añadido que este estudio debería, a su juicio, haber señalado aspectos más concretos en la formación del docente universitario, la selección del profesorado y "sobre todo" la evaluación de la actividad docente que posteriormente subrayó Mateos como consideración a tener en cuenta en el futuro.

A este respecto, el consejero de Educación ha afirmado que las unviersidades de Castilla y León ya han diseñado su método de evaluación de la actividad docente que además "ha sido verificado e informado favorablemente" por la Agencia para la Calidad del Sistema Universitario de Castilla y León (Acsucyl).