El Juzgado de lo Penal número 13 de Sevilla ha condenado a tres años y tres meses de prisión a J.A.P., el joven acusado de amenazar en 2008 en un botellón que tenía lugar en el barrio de Los Remedios de la capital hispalense a un menor de 17 años, A.O.R., quien "presa del pánico" huyó corriendo del lugar de los hechos y fue atropellado mortalmente en la avenida de Carrero Blanco por un turismo que no pudo evitar el golpe.

En este sentido, fuentes del caso informaron a Europa Press de que el Juzgado de lo Penal número 13, en una sentencia notificada ayer lunes, ha condenado a este joven, que se encuentra actualmente en libertad provisional, a tres años y tres meses de prisión por los delitos de lesiones y amenazas, mientras que el Juzgado también lo considera autor de una falta de homicidio imprudente.

Por su parte, fuentes de la acusación particular consultadas por Europa Press aseguraron que han decidido no recurrir la sentencia, pues, aunque solicitaban para el procesado tres años de cárcel por un delito de homicidio imprudente y otros tres años por un delito de lesiones, consideran que el fallo "está bien elaborado y perfectamente justificado".

Conviene recordar, de otro lado, que el Ministerio Público pedía para el procesado un total de cinco años de prisión por los presuntos delitos de lesiones y amenazas, así como el pago de una indemnización a los padres de la víctima de 81.350 euros por el fallecimiento de su hijo y de 6.208 euros a un joven amigo de la víctima que fue agredido en el transcurso de aquella noche.

Los hechos

Los hechos ocurrieron sobre las 4,00 horas del 25 de octubre de 2008, cuando "diversos grupos de jóvenes" se encontraban de 'botellón' en las inmediaciones del Club Náutico de Sevilla, próximo a la avenida de Carrero Blanco. Así las cosas, en un momento de la noche dos jóvenes se acercaron a otro grupo "pidiendo un cigarro", lo que provocó "un enfrentamiento verbal entre ambos grupos", si bien no tuvo mayores consecuencias en aquel instante.

No obstante, el grupo en el que se encontraba el ahora fallecido se marchó del lugar del 'botellón' hacia una parada de autobús, donde los jóvenes se encontraron de nuevo con los individuos con los que poco tiempo atrás habían discutido, iniciándose una pelea "con botellas de cerveza" en la que resultaron lesionados dos amigos de la víctima, aunque no se ha determinado quien causó tales heridas.

Durante la pelea, el hoy condenado, J.A.P., supuestamente "lanzó un golpe con su botella al brazo de otro amigo del fallecido, que le provocó heridas en un brazo que tardaron en sanar 89 días". Todo esto ocurrió en presencia del menor de 17 años, "que al ver lo sucedido a su amigo y presa del pánico, por la agresividad que mostraba el acusado y su grupo, emprendió la huida, siendo perseguido" por el acusado.

El menor llegó corriendo a la avenida Carrero Blanco, donde su perseguidor le seguía con una botella en la mano a "escasos metro y medio o dos metros", lo que provocó que no tuviera "mas opción" que atravesar la avenida y, "como ni aún así el acusado cejaba en su persecución y viéndose alcanzado al llegar a los 'quitamiedos", "no tuvo más remedio que saltar por encima de ellos", cayendo delante de un turismo que pasaba por la zona de forma correcta y que no pudo "evitar el golpe" que provocó la muerte del joven.