El presidente del Govern, Francesc Antich, se ha mostrado hoy satisfecho por "el fruto" alcanzado por las islas en materia de turismo e insularidad tras la veintena de actos acogidos en el archipiélago con motivo de la presidencia española de la Unión Europea (UE) a la que asistieron más de 1.400 personalidades, entre ministros, altos cargos, representantes y máximas autoridades.

El jefe del Ejecutivo autonómico ha remarcado que el "compromiso adquirido" por las islas ha obtenido sus frutos y el hecho de que la comunidad vaya a participar en el desarrollo del primer Plan de Acción sobre Turismo de la UE, ya que los objetivos marcados a nivel europeo coinciden con los de Baleares en diferentes materias como competitividad, innovación, turismo sostenible o desestacionalización. "Baleares debe jugar fuerte y actuar de líder", ha opinado.

Antich, quien ha destacado que el presente y futuro de las políticas de las islas está "estrechamente ligado" a las de las UE, ha defendido también la necesidad de eliminar el límite de 150 kilómetros para que las islas puedan acceder a las ayudas de la UE como regiones transfronterizas.

Según ha subrayado, este semestre de presidencia española ha permitido "hacer escuchar con más fuerza" la voz de Baleares, algo que ha servido a la comunidad para realizar actuaciones en materia de insularidad y turismo.

Asimismo, ha indicado que los más de 1.400 participantes en los actos celebrados en las islas con motivo de la presidencia española de la UE, recibieron material promocional de Baleares, y, además, realizaron visitas guiadas para conocer la riqueza cultural y patrimonial de la comunidad. Según ha añadido, también fue una "operación turística" hacia un colectivo con una gran "capacidad de altavoz".

Nuevos mercados turísticos

Antich ha defendido la necesidad de abrir "nuevos mercados turísticos" y ha adelantado que se está preparando una misión comercial a China para "consolidar las actividades" de los empresarios de las islas e iniciar "nuevos caminos para nuestros productos". El presidente también ha adelantado que durante las próximas semanas se firmará un convenio con Panamá para instalar en este país un centro Microsoft dependiente del de Palma.

Por otra parte, se ha referido a la nueva tasa aérea alemana y ha recordado que la política europea común ya grava las emisiones de las compañías aéreas por lo que, según ha entendido, "lo lógico sería que no se regulase país a país". No obstante, ha admitido que, en las políticas de los Estados y regiones, cada vez tendrá mayor peso poner racionalidad en los temas medioambientales.

Finalmente, el presidente ha negado que estar "interesado en hablar de corrupción" y ha destacado que lo está en que, si se investigan casos relacionados con ésta, se aclaren y se establezcan los mecanismos necesarios para que no se vuelva a repetir.

En este sentido, ha manifestado que él no hace "discursos demagógicos" sobre esta materia, ya que se limita a colaborar al máximo con las investigaciones judiciales. Según ha dicho, no tiene "ninguna alegría" por abordar estos temas.