Dos calles de Logroño y una de las entradas a la ciudad están cortadas al tráfico a causa de una tormenta que anoche dejó 60 litros de agua por metro cuadrado en menos de tres horas.
El Ayuntamiento de Logroño ha informado este lunes de que en algunas zonas del extrarradio es necesario circular con precaución, por los desprendimientos causados por la lluvia. En la zona de la circunvalación se formaron balsas de agua y algunos conductores quedaron atrapados.
En los momentos más intensos de la tormenta llegaron a caer veinte litros en quince minutos y SOS Rioja atendió 1.799 llamadas en dos horas y media.
El Ayuntamiento ha precisado que durante la noche han trabajado en la ciudad efectivos de Policía Local, Bomberos y Protección Civil de Logroño y este lunes continúan bombeando el agua de numerosos garajes que resultaron anegados, entre ellos, el de la Policía Local, en la calle Ruavieja.
Zonas aún con problemas
El Ayuntamiento de Logroño señala en un comunicado que la mayor parte de la ciudad ha recuperado la normalidad, se mantienen los problemas en la carretera de Mendavia -en la zona del Monte de Cantabria-, por desprendiemientos, y en la entrada del Camino de Santiago a Logroño, que está cerrada al tráfico.
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