Grau reitera que la paralización de licencias se hace siguiendo "lo que dice la ministra de Cultura"

El primer teniente de alcalde de Valencia, Alfonso Grau, indicó hoy que la paralización de obras en el Cabanyal se está llevando a cabo según "lo que dice la ministra de Cultura", Ángeles González Sinde, en la Orden Ministerial que paraliza el Plan Especial de Protección y Reforma Interior (PEPRI), por lo que instó al PSPV a que "pida responsabilidades a quien la dictó". Así, lamentó que "quienes están pagando esa metedura de pata e invasión de competencia son los vecinos del Cabanyal".

El primer teniente de alcalde de Valencia, Alfonso Grau, indicó hoy que la paralización de obras en el Cabanyal se está llevando a cabo según "lo que dice la ministra de Cultura", Ángeles González Sinde, en la Orden Ministerial que paraliza el Plan Especial de Protección y Reforma Interior (PEPRI), por lo que instó al PSPV a que "pida responsabilidades a quien la dictó". Así, lamentó que "quienes están pagando esa metedura de pata e invasión de competencia son los vecinos del Cabanyal".

Así lo indicó Grau durante el debate en el pleno del Ayuntamiento de una moción del PSPV sobre la paralización de licencias en el Cabanyal, que fue rechazada por los 'populares'. Según indicó, "aunque digan que es una interpretación restrictiva" de la Orden, el equipo de Gobierno local está siguiendo lo que dice González Sinde, "suspender inmediatamente dicho plan y las actividades administrativas en tanto se lleve a cabo su reforma".

"Si la ministra se ha pasado siete pueblos, que yo creo que sí, el problema es de ella", apuntó Grau, quien recordó que el PP ya ha llevado ante los tribunales la citada Orden Ministerial y animó a los socialistas a que "no escurran sus responsabilidades" en la situación actual.

Por su parte, el defensor de la moción, el edil socialista Vicente González Móstoles, indicó que, con la suspensión del PEPRI "no conduce a la nada urbanística", sino que revive el plan anterior al suspendido que, en este caso, es el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de 1988.

"Pueden y deben otorgar licencias", afirmó el socialista, quien señaló que, si no lo hacen "se estarán limitando los derechos de los ciudadanos y se profundizará en el proceso de destrucción del barrio", que "no es el camino a seguir". En su opinión, "es un acto poco ciudadano permitir que los vecinos de los poblados marítimos no puedan pintar sus fachadas o sustituir sus cubiertas por las goteras", ya que "roza el sainete".

"castigo a la oposición"

Así, acusó al Ejecutivo local de estar ejerciendo una "interpretación maximalista y contraria a derecho para castigar a la oposición" al no haber prosperado la prolongación de la avenida Blasco Ibáñez. Según señaló, esta actitud "está provocando más desgarro social, si cabe, que la propia demolición".

Por ello, instó a los 'populares' a desistir en este empeño y pidió que se notifique por escrito a los vecinos la posibilidad de que reformen sus edificios acogiéndose al PGOU y puedan optar a las ayudas públicas.

Sin embargo, Grau reiteró que "no está vigente" el PGOU de 1988 y que "quien ha creado el vacío en el Cabanyal" es el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.

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