En un comunicado, Aspromonte hizo así referencia a las manifestaciones realizadas ayer por la consejera de la Presidencia y portavoz del Gobierno andaluz, Mar Moreno, al asegurar que sería una "gran sorpresa" y un hecho "escandaloso" que el Banco de España permita a CajaMadrid participar en la puja abierta por CajaSur cuando "acaba de recibir 4.000 millones de fondos públicos para su saneamiento".

Y es que para el sindicato, las presiones de la Junta de Andalucía "pueden rozar la ilegalidad, en tanto en cuanto menoscaban la libertad empresarial de asistencia a una puja que, desde el principio, se ha declarado abierta y voluntaria a todas las cajas interesadas".

Por ello, mostró su "rechazo frontal" a "cualquier injerencia o intento de coacción encaminada a condicionar o dirigir el actual proceso de adjudicación de CajaSur hacia intereses partidistas". Añadió que la Junta de Andalucía tiene la obligación legal de tutelar las cajas andaluzas y con estas declaraciones demuestra su "desprecio por todas las familias que conforman esta entidad, al hacer prevalecer intereses políticos a los intereses sociales y profesionales".

De este modo, dejó claro que apoyará cualquier proyecto que, manteniendo la naturaleza jurídica actual y la unidad de empresa, sea beneficioso para el empleo, principal activo social de la caja, insistiendo en que "es socialmente inaceptable, que el Gobierno andaluz pretenda vetar una de las posibles vías de solución para la problemática de la entidad".

En su opinión, la administración autonómica debería favorecer la participación de cuantas más entidades oferentes mejor —incluida Unicaja—, aunque no la ven favorable por los antecedentes. Considera el sindicato que "sin duda, cuanto más reñido sea el procedimiento competitivo de adjudicación, mejores serán las ofertas en términos de viabilidad, respeto del empleo y uso de préstamos públicos".

Según Aspromonte, Andalucía se beneficiará sólo y exclusivamente si la entidad resultante es "sólida, solvente y con vocación de futuro", ya que la penetración de nuevas entidades con afán de crecimiento en la comunidad mejorará las posibilidades de mantenimiento y creación de empleo, acceso al crédito de los ciudadanos y Pymes e incluso nuevas actividades de obra social encaminadas a conseguir una imagen reputada de la nueva entidad en Andalucía.

En cuanto a las "abiertas pretensiones políticas de crear una caja única e impuesta en Andalucía", manifestó que "de nada sirve el supuesto músculo financiero" si el resultado es sólo un artificio político, atrincherado entre sillones y prebendas, que se sostiene con alfileres y que nada más nacer destruiría el empleo en una región, ya de por sí altamente castigada por el paro".