BADAJOZ, 21 (

Europa press televisión)

En ese momento se produjo un revuelo, según relató la cocinera de uno de los establecimientos que hay en esta plaza, Chelo, quien aseguró que al ver a los cabestros la gente "echó a correr" hasta adentrarse en el local.

Esta misma mujer apuntó que esa noche, pasadas las 22,00 horas, había "mucha gente en los veladores", cuando vieron a las reses que avanzaban por la calle perseguidas por hasta cuatro vehículos de la Policía Nacional y una ambulancia, cuyo conductor iba alertando de lo que ocurría. "Fue un susto bastante grande" y "un ratito bastante malo", pero afortunadamente "todo quedó en el susto", señaló Chelo.

En la misma línea, el hostelero Santiago Morgado, quien también presenció lo ocurrido, señaló que cuando la ambulancia les avisó de que los bueyes "se habían escapado" en un primer momento pensaron que era "una broma" hasta que instantes después vieron "los cuernos de la manada que subía" por la calle, y entonces entraron "en pánico" y se "produjo una verdadera estampida" entre sus clientes por entrar en el local.

Por su parte, el empresario de la plaza pacense, Joaquín Domínguez, achacó lo ocurrido a "un cúmulo de circunstancias", entre ellas que una de las puertas del recinto en el que se encontraban los animales no estaba convenientemente cerrada, de manera que las reses pudieron salir al exterior de la plaza.

"Un buey comprobó que la puerta estaba abierta y en ese momento estaba saliendo el camión de las carnes y ha salido a la calle", expuso el empresario, al tiempo que apuntó que cuando le han avisado y ha salido a la calle, para su "sorpresa" se encontró con los cuatro animales fuera de la plaza.

Asimismo, expuso que los cabestros recorrieron entre "dos o tres kilómetros" por Badajoz, sin causar "cogidas ni accidentes", tal y como destacó, hasta que la Policía Nacional "con mucha suerte" devolvió tres a la plaza, y al cuarto, que se encaminó en solitario hacia el río, hubo que apresarlo con una soga. Es increíble, nos ha quedado totalmente sorprendidos", reconocía Joaquín.