En declaraciones a Europa Press la alcaldesa abderitana, Carmen Crespo (PP), trasladó la "indignación" ante los retrasos que acumula la vía, que debía haber estado terminada en 2009 y que, según subrayó, con los "recortes" en la cartera de Fomento incluidos en el plan de ajuste del Ejecutivo "se emplaza hasta 2011" y la mantiene como "único tramo costero hasta Bruselas sin autovía".

Crespo, para quien resulta "injusto" en agravio comparativo con una zona para la que resulta vital la puesta en funcionamiento en su totalidad de la A-7, hizo referencia además al estado "digno de ver", ahondó, en que se encuentra el firme de la carretera —N-340— que une el litoral granadino y almeriense debido a lo "numerosos desprendimientos" registrados durante la época invernal.

"Está en muy malas condiciones, destrozada, con lo que eso supone para el turismo, pese a que ahora la estén reparando", aseguró la primera edil al tiempo que destacó que supone la salida rodada hasta los aeropuertos orientales "más importantes" como Granada y Málaga y una opción natural para el transporte de los productos hortofrutícolas que sustentan en gran parte la economía del Poniente.

Crespo, quien avanzó que se adoptarán "medidas de forma urgente" antes de que acabe el mes de junio, incluida la movilización que liderará Motril, valoró, asimismo, el comunicado conjunto que el sector empresarial hizo público el pasado día 18 ya que, remarcó, "es una prioridad para ellos, que ven poca diligencia con el devenir económico" de ambas provincias.

Las cámaras de comercio de Granada, Almería y el municipio de Motril, así como las asociaciones empresariales Asempal y CGE, calificaron en su escrito de "inasumible" la paralización o retraso de las obras en la Autovía del Mediterráneo dada la importancia que dicha infraestructura tienen "para el desarrollo económico de estos territorios, para su futuro y para la mejora de su competitividad".