En un comunicado, la Conselleria dirigida por Vicens Thomàs, detalló que los tres ejes sobre los que gira el programa de acción para tratar de reducir los efectos nocivos que sobre la salud pueden tener las altas temperaturas son "la prevención, mediante la difusión de consejos a la población, el refuerzo asistencial, con incremento de personal en los centros de salud y hospitales; y la creación de un dispositivo de información y vigilancia".

Así, concretó que la campaña informativa va dirigida a la población en general, con una especial atención a la población de riesgo, como los niños, los enfermos crónicos y los mayores de 65 años, así como a las personas que trabajan al aire libre. Además, añadió que como cada año, se pedirá colaboración a los Consells Insulares, Ayuntamientos y Cruz Roja.

Concretamente, apuntó que los mensajes se centrarán en las medidas preventivas frente al calor, de forma que se recomendará a los ciudadanos consumir más líquidos, sobre todo, beber mucha agua y preocuparse de que los niños y personas mayores beban; reducir la actividad física; evitar las comidas abundantes; utilizar ropa fresca y refrescarse a menudo.

Otro de los mensajes será tener precaución con el sol, especialmente entre la población infantil, para lo cual se aconseja utilizar una crema con filtro solar frente a los rayos UVA y UVB, con un factor de protección mínimo de 15. Respecto a los alimentos, se recomienda conservarlos correctamente y limpiar las frutas y las verduras.

La Conselleria recordará a la población que el teléfono 061 está a disposición de los usuarios que tengan cualquier consulta médica, al tiempo que se ha puesto en marcha un dispositivo de información y vigilancia, que tiene como función conocer de manera anticipada una oleada de calor. En caso de que sea así, la Conselleria indicó que será de utilidad para saber la incidencia real sobre la salud, mediante indicadores relativos a demandas asistenciales.

De acuerdo con los Ministerios de Sanidad y Medio ambiente, se han establecido cuatro niveles según las temperaturas umbrales máximas y mínimas establecidas, que en el caso de Baleares son 35 de máxima y 22 de mínima).

Si las previsiones (a cinco días) de las temperaturas indican que se superará de forma simultánea el umbral de la temperatura máxima y mínima, se establecerán los siguientes niveles: Nivel 0 (verde): de ausencia de riesgo; Nivel 1 (amarillo): de bajo riesgo; Nivel 2 (naranja): de riesgo mediano y Nivel 3 (rojo): de alto riesgo.

Concretamente, el nivel 1 se activa cuando en un plazo de cinco días, hay 1 o 2 días consecutivos con temperaturas superiores a los umbrales, mientras que se activa el nivel 2 si superan los umbrales 3 o 4 días consecutivos. Finalmente, se activará el nivel 3 cuando, durante 5 días, las temperaturas superen los umbrales establecidos.

Asimismo, el programa fija el control, por parte del Servicio de Salud y de la Dirección general de Salud Pública y Participación, de la evolución diaria de las urgencias y defunciones hospitalarias en los centros públicos, así como de las urgencias atendidas por el 061.

Comisión de seguimiento

Por otro lado, la Conselleria anunció que los datos del sistema de información y vigilancia serán valorados en el marco de una Comisión de seguimiento integrada por dos miembros de la Dirección general de Salud Pública y Participación; otros dos del Servicio de Salud; un representante de la Oficina de Cambio Climático de la Conselleria de Medio ambiente y un representante del 112.

De este modo, esta Comisión será la que coordine con el Ministerio de Sanidad y Consumo la activación de las alertas y propondrá, si llegara el caso, las actuaciones organizativas y estructurales adecuadas para cada nivel.

Por otra parte, avanzó que el Servicio de Salud de Baleares refuerza la dotación de los profesionales sanitarios de los centros de Atención Primaria en las zonas costeras para dar respuesta al aumento de la demanda, como consecuencia del carácter claramente turístico de la Comunidad.

En concreto, desde el comienzo del mes de junio ya se incorporan la mayor parte de los refuerzos veraniegos en los centros de salud. En total, son 17 médicos, 11 enfermeras y 6 no sanitarios de refuerzo.