Más de 20.000 personas han participado en lo que va de año en las actividades organizadas por la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Biodiversidad para fomentar el conocimiento y el uso público de la Red de Espacios Naturales Protegidos de Cantabria.

Esto supone un aumento del 482 por ciento con respecto al primer semestre del pasado 2009, algo que el consejero, Jesús Oria, atribuye principalmente al incremento "considerable" de las actividades ofertadas, pero también a la sensibilización y al "boca a boca".

Oria, acompañado de la directora general de Biodiversidad, María Eugenia Calvo, presentó hoy las nuevas actividades organizadas para el segundo semestre del año —un periodo en el que se aumentan las propuestas por la llegada del verano—, al tiempo que hizo balance de los seis primeros meses del año.

En lo que va de 2010 la cifra de participantes en las actividades de la Red supera los 20.000, de los cuales, 12.729 visitaron los centros de interpretación. El que recibió más personas fue el Centro de Visitantes de las Marismas de Santoña (casi 8.000), seguido de los centros de interpretación del Parque Natural Saja-Besaya (3.470) y del Parque Natural Collados del Asón (2.816).

De cara al segundo semestre las actividades ofertadas aumentan "notablemente", por la llegada del verano, pero también para impulsar las propuestas que cuentan con más demanda. Habrá paseos en barco, rutas guiadas a pie de diferentes grados de dificultad, avistamientos de aves, rutas en bicicleta de montaña, visitas al Centro Ictiológico de Arredondo y una observación de la berrea al comienzo del otoño, entre otras propuestas.

Todas las actividades son gratuitas y abiertas a la participación de cualquier persona interesada. Eso sí, se aconseja la inscripción previa en los teléfonos habilitados para cada uno de los espacios en los que se ofertan actividades. La Consejería ha editado material informativo con las rutas y actividades organizadas en cada área y los teléfonos de contacto.

En concreto, ha publicado folletos con las actividades programadas en el Parque Saja-Besaya y los espacios naturales protegidos del Saja Nansa; de la Red Natura 2000 en Liébana; del Parque Natural de las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel; del Parque de los Collados del Asón y otros espacios protegidos de la Montaña Oriental; y del Espacio Protegido del Embalse del Ebro y Centro Ornitológico.

También se puede obtener más información a través de la página web 'www.biodiversidadcantabria.es' y del sitio 'www.redcantabrarural.com', ya que la Red Cántabra de Desarrollo Rural es la que se encarga de desarrollar las actividades en sus zonas de actuación.

Año de la biodiversidad

A todas estas actividades se sumará además el programa de actos convocado por la Consejería para celebrar este sábado, día 19, el Año Internacional de la Biodiversidad Ecológica. Las actividades se centrarán en la ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) de Hoces del Ebro, en Valderredible, y fomentarán el conocimiento de la biodiversidad y las amenazas que la afectan.

A las nueve de la mañana comenzará una ruta guiada por la ZEPA, que recorrerá el Páramo de Bricia y el Cañón del Ebro. La salida será desde Villaescusa de Ebro y terminará en San Martín de Elines. Más tarde, a las doce, habrá una segunda ruta, "menos exigente", sólo por el Cañón del Ebro. En este caso la salida será desde Orbaneja del Castillo y el final en San Martín de Elines.

En esta última localidad, a las dos de la tarde, habrá una comida popular organizada por el Ayuntamiento de Valderredible y seguida de una observación de aves.

"garantes de la biodiversidad"

El consejero destacó que los espacios naturales protegidos son el "principal garante" de la biodiversidad de Cantabria, que cuenta con 155.000 hectáreas de espacios protegidos, lo que supone una tercera parte del territorio regional.

Según dijo, los espacios naturales protegidos son una "herramienta clave para la conservación de la biodiversidad", tanto de especies, como de hábitats, ecosistemas y del paisaje. Al mismo tiempo, aseguró que son un "elemento complementario en el desarrollo sostenible del medio rural".

Y para conseguir ambos objetivos, consideró "fundamental" el uso público de estos espacios, como está fomentando su departamento a través de estas iniciativas.

Oria recordó que el programa de uso público de los espacios protegidos se impulsa a través de convenio con la Red Cántabra de Desarrollo Rural, que se encarga de desarrollar las actividades en los espacios que se encuentran dentro de sus zonas de actuación. En el caso de las Marismas de Santoña, se hace cargo la Consejería, mediante una encomienda a Tragsa.

El consejero resaltó el "éxito de participación" del programa y explicó que la intención de su departamento es extender las actividades a todos los espacios naturales protegidos.