Así lo anunció en rueda de prensa la regidora de Urbanismo, Yolanda Garví, quien aseveró que se trata de una situación que se está produciendo pese a tratarse de un uso no permitido en los llamados espacios modificables de parcela, que se extienden desde la vertical de los edificios hasta la vía pública. De este modo, se regularizará que la actividad de estos locales, que en estos momentos únicamente está sometida a control policial, y de este modo podrá extenderse entre la fachada y la acera.

Una medida que conllevará la modificación del Plan General de Palma -con la introducción del artículo 63, que regulará la situación de estas terrazas-, del artículo 10 de la Ordenanza de regulación de horarios de apertura al público, de la Ordenanza para la protección del medio ambiente contra la contaminación por ruidos y vibraciones, y de la Ordenanza municipal de Actividades.

La edil, que eludió concretar el número de terrazas que se encuentran en esta situación, aseveró que "en ningún momento" esta iniciativa, que fue solicitada por la Asociación Empresarial de Actividades Turísticas de la Playa de Palma y elevada al pleno por el PP, irá en detrimento de la normativa del ruido, que seguirá cumpliéndose "de forma estricta" y para ello se realizarán inspecciones municipales.

Garví señaló que esta medida podrá hacerse extensible a hoteles, bares y locales recreativos ubicados en Es Molinar, Cala Gamba, Cala Major, Marivent, Cas Català y Can Pastilla.

Son bordoy y son garcies vell

Por otro lado, también mañana serán elevadas dos propuestas relativas la implantación de un uso sociocultural a la zona de Son Bordoy para la instalación del recinto ferial, y a la recalificación del polígono de Son Garcies Vell -de suelo rústico- para instalar empresas de alquiler de vehículos. Dos acuerdos alcanzados en pleno pero que cuenta con informes técnicos y jurídicos desfavorables, por lo que pese a ser llevadas a Junta de Gobierno no serán tomadas en consideración.

En relación al acuerdo sobre Son Bordoy, los técnicos señalan que la propuesta es inviable ya que dentro de esta zona el Govern está tramitando una reserva estratégica de suelo, lo que se impone al planeamiento municipal. "Se trata de una iniciativa que no es posible mientras el Ejecutivo balear tramite este proyecto", recalcó la titular municipal de Urbanismo.

En cuanto a Son Garcies Vell, aseveró, de acuerdo a los informes desfavorables, que la propuesta "no responde a la lógica de cualquier planificación urbanística, y averiguar qué intereses persigue es algo que no entraremos a valorar". Garví apuntó que se ha constatado que en torno al aeropuerto de Son Sant Joan se encuentran los polígonos de Son Morro, el de servicios de Llevant y Son Oms, además de dos terrenos calificados como posibles urbanizables -Ses Calafates y Son Garcies Vell-.

"Se trata de una parcela de 15 hectáreas que no tenemos necesidad de recalificar, sino que nuestra intención es hacer un urbanismo planificado", incidió la regidora al respecto. Así, esta petición efectuada por particulares y aprobada por mayoría en pleno ha sido rechazada hasta en tres ocasiones "ya que el proyecto puede llevarse a cabo en suelo ya transformado", concluyó.