"Debemos adueñarnos de las herramientas para construir nuestra autonomía. Para dar continuidad al cambio, se deben superar los problemas de arrastre y un condicionante central es nuestra deuda", dijo Kirchner en la Casa de Gobierno, en un salón colmado de gobernadores, parlamentarios, empresarios y dirigentes sindicales.

El mandatario destacó que con este pago anticipado, que se cumplirá a fin de año, mediante las reservas monetarias del Banco Central Argentino, y en el que se utilizará el 33,4% de los 26.892 millones de dólares, Argentina se ahorra intereses por 1.000 millones de dólares de los vencimientos previstos hasta 2008.

"Al destinarse (al pago) reservas de libre disponibilidad se garantiza un efecto monetario neutro. La medida puede adoptarse en función de la solidez que va adquiriendo el modelo de producción, trabajo y crecimiento sustentable, sin apoyo alguno del FMI", señaló.

La economía argentina respira

Añadió que la decisión fue tomada en un contexto de "solvencia macroeconómica", con un Producto Interior Bruto (PIB) que en los primeros tres trimestres del año acumuló un crecimiento del 9,2%.

El gobernante señaló que con esta medida se concreta la "estrategia de reducción de deuda a un nivel compatible con las posibilidades de crecimiento y pago de Argentina, ganando además grados de libertad para la toma de decisiones".

Destacó que éste fue "un paso largamente conversado con los presidentes del Mercosur (Mercado Común del Sur, formado por Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay) en general y especialmente con el brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva", quien el martes resolvió cancelar en forma anticipada 15.500 millones de dólares adeudados al FMI.

Endeudamiento y ayuda venezolana

Kirchner también agradeció a la ayuda permanente recibida de Venezuela, que en los últimos meses concretó millonarias compras de bonos de deuda pública argentina.

La "política argentina de desendeudamiento" fue impulsada desde abril de 2002 por el entonces ministro de Economía, Roberto Lavagna, quien dejó su cargo el pasado día 1, y ratificada por Kirchner desde su llegada al Ejecutivo, en mayo de 2003.

En los últimos tres años, Argentina canceló deudas con los organismos multilaterales de crédito por 14.500 millones de dólares.

El país suramericano debía cancelar el próximo año vencimientos con el FMI por 5.082 millones de dólares, en tanto que en 2007 debía pagarle 4.635 millones de dólares y 432 millones de dólares en 2008.