Según informó hoy la entidad, que ha sido la última en ratificar su entrada en CRM, está previsto que los presidentes de las cajas firmen el próximo lunes el contrato de constitución de CRM, que comenzará a operar a partir del 1 de julio.

El grupo cooperativo, que tiene a Ruralcaja como entidad cabecera, está impulsado asimismo por las cajas rurales de Torrent, Crèdit Valencia, Altea, Burriana, Callosa d'en Sarrià, Nules, Alqueries, Cheste, Alginet, Vilavella, Almenara, Xilxes y Vilafamés.

Además, los miembros del Consejo Rector de Ruralcaja y los 121 delegados que participaban en representación de los más de 204.000 socios también aprobaron la gestión social de la entidad, así como las cuentas anuales, el informe de gestión y la propuesta de aplicación del excedente disponible, correspondientes a 2009.

En la asamblea general de hoy, tuvo lugar la reelección del Consejo Rector y se nombró a Eduardo Ferrer Perales como presidente de la entidad.

Durante su intervención, Ferrer destacó que "hoy es un día histórico, no solamente para Ruralcaja, sino para el cooperativismo de crédito en general". "Catorce cajas rurales hemos unido nuestras fuerzas para hacer realidad un grupo cooperativo, cien por cien valenciano, que se convertirá en la casa grande del cooperativismo de crédito de la Comunidad Valenciana", dijo.

Para asegurar la representación y presencia de todas las entidades en el grupo CRM, Ruralcaja, como entidad cabecera, ha ampliado su Consejo Rector de 15 a 21 miembros.

El nuevo Consejo, que actuará como órgano central del grupo consolidado, contará con cinco miembros permanentes que corresponden a Caixa Rural Torrent, Crèdit Valencia, Caixa Rural de Burriana, Caixa Rural de Nules y Caixa Alqueries.

El resto de plazas será de carácter rotatorio cada cuatro años. Así, en el actual Consejo se incorporan Caixaltea, Caixa Callosa, Caixa Rural Cheste, Caixa Rural Alginet y Caixa Vilavella.

El director general de Ruralcaja, Juan Antonio Gisbert, resaltó que CRM "incorpora un sistema institucional de protección que se plantea para garantizar la solvencia y la liquidez de todos sus miembros", para lo que las cajas "se ofrecen fianza mutua, líneas de liquidez y otro tipo de recursos".

Hizo hincapié en que "el Grupo CRM, aunque incorpora un SIP, pretende ser mucho más que un sistema de protección, pretende ser una vía para mejorar la eficiencia de las entidades del grupo".

"Desde el primer momento entendimos que obtener lo mejor de nosotros mismos pasa, necesariamente, por mantener el fuerte arraigo local, la independencia jurídica, la permanencia de la marca, la defensa de los intereses de los sectores que nos dan sustento y el mantenimiento de la obra social propia de cada entidad", relató.

Respecto al trabajo realizado desde el inicio del proceso de constitución del grupo, en julio de 2009, valoró "la labor desarrollada por todas las cajas rurales que ya han acordado su incorporación al grupo CRM" y agradeció su trabajo "a sus consejos rectores, a sus directores generales y a todo su personal".

Gisbert ratificó su reconocimiento al consejo rector de Ruralcaja, a quienes dijo: "No les quepa duda alguna a ustedes que para hacer viable una operación de esta importancia, naturaleza y complejidad, unos y otros han tenido que mostrar unas altas dosis de generosidad y capacidad de reflexión y diálogo".