En una entrevista concedida a Europa Press, Cabanas, que escribe compaginando "de forma nada fácil" la literatura y su profesión de piloto, señaló que tras 'El sueño milenario', vuelve a Egipto porque es "su gran pasión", además porque así se lo han pedido tanto lectores como la editorial.

De esta manera, 'El hijo del desierto', según el escritor, ofrece una imagen distinta de lo que se está acostumbrado a ver del país africano, pues aunque ellos mantienen su cultura, su estructura social y su monumentalidad, aparece "la cara terrible de la guerra".

En este sentido, indicó que la obra "es un alegato contra la guerra" y aborda un periodo en el cual se desarrolla todo el imperio del antiguo Egipto y como consecuencia de la creación de un imperio, éste se hace a costa de alguien. Cabanas, que visitó hoy Sevilla para promocionar su novela, señaló que Egipto expande sus fronteras al mundo conocido en el momento, pasando de sus fronteras naturales del Sinaí a nuevos límites territoriales, a un Estado con provincias administrativas nuevas creadas por el faraón y una nueva concepción política del país, que reporta enormes riquezas a Egipto, pues "obviamente la guerra enriquece al país y cambian su política para siempre".

Asimismo, Cabanas reconoció que esta mirada es "desconocida" en el sentido de que "siempre se habla de la faceta cultural y monumental sobresaliente de Egipto, una idea antagonista a la concepción de un país guerrero". En este sentido, precisó que después de una gran guerra, vienen épocas de florecimiento cultural como así se demuestra que tres generaciones posteriores hicieran florecer la cultura de los grandes artistas.

A través del personaje ficticio de Sejemjet, la obra, según explicó, retrata la época y viaja a la sociedad, abordando cómo fueron las guerras, la vida de los soldados, la organización, el poder de los escribas, los poderes en la sombra que, como "un lobby actual", buscaba hacerse más grandes.

Además, Cabanas aclaró que con el protagonista quería ir "más allá" de la guerra, esto es, a través de un personaje parecido al "Aquiles" de Homero que alberga "el poder de un guerrero y la compasión humana" y que refleja a un personaje "complejo con muchas sombras".

"el hombre ha cambiado poco"

El lector, según expresó Cabanas, recorrerá las páginas a través del faraón "más poderoso" de Egipto Tutmosis III, además de pasiones tremendas, una historia de amor, el día a día en las relaciones, la sexualidad desinhibida, hasta el punto de pensar en su promiscuidad, aventuras, traición, esto es, "la vida misma, pues el hombre ha cambiado poco a través de los siglos", aseguró.

Cabanas, que lleva 25 años estudiando la civilización egipcia, confesó que todos los lugares que recorre son visitados realizando un trabajo de campo sobre ellos, conociendo la vida de los personajes, sus frases, incluso visitando sus tumbas, sobre todo, de los menos conocidos.

El libro es "una invitación" para conocer Egipto hace más de 3.500 años, según indicó, si bien, precisó que las relaciones entre hombres y mujeres no han cambiando mucho, ni tampoco los gustos, pues un ejemplo de la similitud entre sociedad es el "gusto por los festejos y romerías, vinculados a la tierra, es decir, a siembras y recogidas".

Por otro lado, Cabanas resaltó el poder de la magia y la superstición del mundo egipcio, subrayando que existieron más de 2.000 dioses. Asimismo, reconoció que no es la primera vez que se plantea la posibilidad de llevar algunas de sus obras a al cine, si bien, apuntó que 'El hijo del desierto' cuenta con muchos ingredientes para llegar a la gran pantalla, pues ofrece "aventuras, amor, pasión, traiciones, una historia recogida en 20 años, persecuciones, así como un escenario lleno de magia como es Egipto".