Areces aspira a que la Estrategia del Arco Atlántico se incluya en las perspectivas financieras de 2013

El presidente del Principado, Vicente Álvarez Areces, destacó hoy en Gijón que la Estrategia Integrada para el Arco Atlántico que se pretende que respalde la UE, similar a la existente ya en el Mar Báltico, debe girar en tornos a unos los objetivos "claros y no numerosos", ligados, por ejemplo, a la investigación marina o el transporte marítimo o la protección del medio marino y la costa, y apostó por su inclusión en las perspectivas financieras de 2013.

El presidente del Principado, Vicente Álvarez Areces, destacó hoy en Gijón que la Estrategia Integrada para el Arco Atlántico que se pretende que respalde la UE, similar a la existente ya en el Mar Báltico, debe girar en tornos a unos los objetivos "claros y no numerosos", ligados, por ejemplo, a la investigación marina o el transporte marítimo o la protección del medio marino y la costa, y apostó por su inclusión en las perspectivas financieras de 2013.

A este respecto, indicó que el Atlántico tiene muchas más posibilidades de investigación marina y de energías renovables, dado el oleaje y las corrientes de éste. Así lo manifestó antes de intervenir en una ponencia organizada la CRPM (Conferencia de las Regiones Periféricas Marítimas) en Laboral Ciudad de la Cultura.

Asimismo, recalcó que el objetivo de la elaboración de este plan que se presentará a la Comisión Europea es incluirlo en programas operativos y conseguir financiación para el desarrollo de esas políticas, aunque advirtió que debe contar con el respaldo de todos los implicados.

Areces insistió en que se precisa de un paquete financiero porque si no va a quedar "sólo en un discurso político", por lo que instó a la Comisión Europea a que se incluya en los próximos procesos de financiación en las perspectivas financieras para 2013.

Sobre estas últimas, señaló que se están preparando las perspectivas financieras para 2013 de una Europa, que se espera que ya haya remontado los puntos más difíciles de la crisis, dijo. No obstante, advirtió sobre que ya nada va ser cómo era antes, ya que habrá una reclasificación de las regiones en función de los nuevos objetivos. "Ahí, el que mejor se posicione, será el que lleve esto adelante", indicó.

Respecto a la Estrategia Báltica, incidió en que tiene ya un camino recorrido y cuenta con el respaldo de algunos países miembros, además de ser asumida ya por la CE. Según él, van en cabeza y abogó por aprender del camino mostrado.

Por el contrario, lamentó que en la Estrategia Atlántica no se tuvo la fuerza para que los cinco países que lo forman "arrancaran con la misma potencia y la misma unidad" que la del Báltico. Es más, apuntó a algunas vacilaciones por parte del Reino Unido.

Sin embargo, enfatizó que lo más fuerte aquí son las regiones, ya que están articuladas en un organismo que es la CRPM y, dentro de esta, cuatro grandes comisiones, con gran experiencia acumulada de la del Atlántico.

La estrategia afectaría a los países de España, Reino Unido, Portugal, Irlanda y Francia, e incluso dijo que se podría alargar un poco más aunque precisó que el CRPM tiene bien definido el espacio.

Areces resaltó que Asturias cuenta con una posición céntrica en este Arco Atlántico y también muy fuerte de sus puertos. Como ejemplo, citó el de El Musel y recordó que las políticas marítimas también afecta a otras comunidades no costeras, como Castilla y León, donde se construyeron puertos secos.

A su juicio, la misma definición de Arco Atlántico podría asumirse desde el Comité de las Regiones y así es como dijo que se lo va a plantear, para que se cree un grupo de trabajo de cara a la decisión que adopte la Comisión Europea.

Además, el jefe del Ejecutivo regional ahondó en que las cuencas marítimas deben definir dos o tres objetivos solamente para poder ser eficaces. Todo ello puesto en común en un paquete conjunto por Estados Miembros, regiones, municipios, entidades sociales.

También citó entre los objetivos la mejora de los tráficos terrestres a partir del mar. En este punto, recalcó la apuesta de la UE por las autopistas del mar, para ver si se extienden y su uso descongestiona el tráfico terrestre, como pueda ser entre España y Francia.

Además, aludió a la protección del medio marino y de litoral de las costas, tal como se hizo en el Principado, así como un turismo sostenible, la mejora de los espacios o la seguridad marítima.

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