El objetivo es "invitar al respeto hacia los menores cuya orientación e identidad sexual es homosexual, transexual y bisexual, así como a las hijas e hijos de familias homoparentales".
Consiste en la colocación de más de 500 carteles en los centros educativos, locales y lugares públicos de nuestra Comunidad.
Institutos de Educación Secundaria, Colegios Públicos Concertados, Centros de Educación para Personas Adultas, y centros como la Escuela de Arte y Superior de Diseño o la Universidad de La Rioja colaboran en la divulgación de esta campaña entre su alumnado. Estos 45 centros educativos colaboradores suponen más de tres de cada cuatro centros efectivamente contactados.
Desde la asociación GYLDA consideran que la diversidad afectivo-sexual "ha de estar integrada longitudinal y transversalmente en el Sistema Educativo, generando un espacio seguro para los jóvenes homosexuales, transexuales y bisexuales, así como a las hijas e hijos de familias homoparentales".
Entre todos, continuó, "debemos erradicar el insulto y la agresión hacia estos jóvenes, así como el temor a las mismas, debemos evitar las dobles vidas, el stress y la ansiedad que viven".
Esto "se puede conseguir apoyando a las familias con información y conocimiento de la realidad LGTB de sus hijas e hijos. Es además especialmente importante el lenguaje empleado por los educadores, los medios de comunicación y las instituciones, a la hora de tener en cuenta la diversidad afectivo-sexual y familiar", concluyó.
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