El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, culpó hoy al Gobierno central de la situación del campo y de suponer la "peor plaga" para el sector a la agricultura y la ganadería al no practicar una verdadera política de Estado y defenderlo ante Bruselas.

Herrera se expresó así en respuesta a una pregunta de la portavoz del Grupo Socialista, Ana Redondo, sobre si piensa corregir la política de desarrollo rural de la Junta para invertir la "preocupante" situación del campo.

El presidente de la Junta, frente a la ausencia de una verdadera política de Estado, defendió el trabajo llevado a cabo por el Gobierno regional con "prioridades" y medidas pactadas con el sector para la modernización, viabilidad y rejuvenecimiento del campo.

En este contexto, aseguró que en el periodo 2007-2013 se invertirán 4.200 millones de los que 2.880 aporta "exclusivamente" la Comunidad.

Herrera recordó el presupuesto de 678 millones de euros en 2010 para el sector y aseguró que dentro de las competencias del Gobierno regional se han tomado diversas medidas para resolver los problemas derivados de la liberalización del mercado y para flexibilizar fórmulas de financiación, entre las que recordó por ejemplo la anticipación de los pagos de la PAC o la firma de convenios para refinanciar a 15.000 agricultores y adelantar líneas de préstamos.

El jefe del Ejecutivo regional, frente a las críticas de la oposición socialista por apoyar el almacén temporal centralizado de residuos nucleares (ATC), aseguró que el único "cementerio nuclear" que quedará en la Comunidad es la central de Garoña, donde con el "aplauso" y apoyo del PSOE de Castilla y León se van a "enterrar" 1.000 empleos por el "capricho y la arbitrariedad" del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

Herrera responsabilizó al Gobierno de la situación de "postración" de los ganaderos y aseguró que en la última manifestación que protagonizaron, en la que pedían una "política de Estado" y el compromiso de defender sus intereses en Bruselas, se les impidió llegar al Ministerio de Agricultura y Ganadería al haber "suprimido" estos términos del rótulo del departamento ministerial que se encarga de esta materia.

Asimismo, criticó que se pretenda dar "lecciones" a la Junta cuando el Gobierno ha reducido "drásticamente" el presupuesto en agricultura y ganadería o incluso ha eliminado recientemente un departamento que llevaba 20 años funcionando como el Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria.

Además, recordó que gracias a la Junta de Castilla y León se incluyó en la agenda de la Presidencia española de la UE el encauzamiento de la negociación de la Política Agrícola Común (PAC) para el periodo que comenzará en 2014 y no se ha hecho "absolutamente nada", por lo que existe una incertidumbre ante la PAC porque la única aportación ha supuesto discutir los repartos de la misma que ha supuesto que los agricultores de regadío y secano reciban los mismos fondos.

Falta de prioridad.

Por su parte, Ana Redondo criticó que en 23 años el campo no haya sido una prioridad para el Ejecutivo autonómico cuando se produce un éxodo de mujeres y jóvenes de las zonas rurales, 500 municipios tienen menos de 100 habitantes o 6,000 explotaciones agrarias han cerrado en los últimos dos años, mientras que la Junta cuenta con competencias exclusivas.

La portavoz socialista cuestionó si la situación sería la misma en el caso de que se hubieran tomado medidas "reales" y pidió al presidente de la Junta que ejerza sus competencias con el mismo "ímpetu" con el que ejerce la oposición al Gobierno central.

Así, aseguró que por un lado la Junta pide más competencias y por otro no ejerce las que tiene y responsabilizó al Ejecutivo autonómico de incumplimientos como el compromiso de sumar 1,000 jóvenes al campo, el plan de apoyo a las mujeres rurales, anunciado "cinco veces" o el acuerdo para reconocer la titularidad compartida de las explotaciones agrarias.

Por ello, Redondo considera que las mujeres del mundo rural sólo han contenido palabras mientras que el Gobierno regional sólo es responsable de un "batiburrillo" de medidas que elabora al mismo tiempo como un plan de empleo rural, otro de empleo para jóvenes, el plan de convergencia interior o la agenda de la población, entre otros. "La Junta gana tiempo pero ha perdido el rumbo", dijo.

Así, criticó que se defienda el "cementerio nuclear" como única apuesta tras 23 años de gobierno y pidió el cambio de políticas ya que no ha acometido reformas estructurales.