El acto sirvió para reinaugurar la barandilla modernista que ha sido restaurada en los últimos meses en una actuación de urgencia para evitar el grave riesgo que suponía su avanzado estado de degradación.

El alcalde de Tarragona, Josep Félix Ballesteros, explicó que la rehabilitación de los primeros 60 metros de barandilla es la primera fase de una actuación más ambiciosa que ampliará el saneamiento de la estructura metálica modernista "hasta la Vía Augusta", en uno de los puntos con mejores vistas sobre el anfiteatro romano.

El acto de 'apadrinamiento' de una de las piezas más conocidas del patrimonio cultural de la ciudad despertó gran curiosidad entre los numerosos turistas que se acercan al balcón, al que se acude tradicionalmente desde la Rambla para 'tocar hierro'.

Los colegios de Educación Especial de la provincia y la Fundación Topromi, entidad para la promoción laboral de los discapacitados, también participaron en la confección de un rompecabezas colectivo con la imagen del Balcón, actividad enmarcada dentro del programa 'Tarragona, ciudad educadora'.

Como recuerdo de la reinauguración se ha realizado una placa conmemorativa con un fragmento del poema 'El Balcó' de Carles Cepero.