En ese sentido, la consejera indicó en una respuesta a una pregunta del PP en comisión en el Parlamento andaluz que la Junta puso en práctica una serie de medidas para reducir partidas en 2009 y 2010, de forma que el ahorro en el gasto corriente no vinculado a prestación de servicios fundamentales se cifró en 300 millones de euros entre 2008 y 2010.

De esta forma, entre esas medidas apuntó la limitación de nuevas plazas de servicios generales al 15 por ciento, limitación de las retribuciones de directivos de empresas públicas, reducción de un 50 por ciento de los gastos de información y publicidad, reducción del 55 por ciento en gastos de protocolo y representativa; bajada del 40 por ciento en publicaciones; de un 32 por ciento en estudios y trabajos técnicos.

Asimismo, se logró reducir en ese tiempo en un 31 por ciento el gasto en material de oficina, en un 27 por ciento el gasto en comunicaciones telefónicas, una reducción del 23 por ciento en locomoción y dietas y se redujo un 22 por ciento en acciones de mantenimiento, reparación y conservación.

Recordó que además se congeló en ese tiempo las retribuciones de los altos cargos y aludió a la desaparición de 39 altos cargos en las últimas reestructuraciones del gobierno andaluz.

La consejera recordó que la Junta está comprometida en presentar ante el Consejo de Política Fiscal y Financiera un plan de sostenibilidad del sector público empresarial, para lo que pidió la colaboración de los partidos políticos y con el que expresó el compromiso de la Junta con la austeridad y con la sostenibilidad "entendida como proyecto social y pieza clave para la recuperación económica y la creación de empleo".

Martínez Aguayo, por alusiones de la diputada del PP María Teresa Ruiz-Sillero, recordó que el presupuesto de las obras del Palacio de San Telmo, "son algo más de 47 millones de euros, no 70 millones" y recordó la importancia de la obra "de una sede emblemática de la Junta que representa el gobierno de todos los andaluces".

Asimismo, destacó el hecho de que Andalucía "sólo destina el 0,21 por ciento de su presupuesto a arrendamientos, mientras que en Madrid asciende al 0,67 por ciento, tres veces mas" y aseguró que "comparando con otras comunidades, se puede demostrar, dato por dato, la austeridad y el rigor en el gasto de la Junta de Andalucía.

Por su parte, Ruiz-Sillero, consideró que con las medidas de austeridad planteados, la Junta "se queda corta" y aseguró que los planteamientos del Gobierno andaluz "no son creíbles".

Además, consideró que la Junta "hace el juego de las sillas, puesto que el 80 por ciento de sus altos cargos suprimidos han sido recolocados" y aludió a la existencia de "chiringuitos creados para externalizar servicios y colocar al personal".

Por ello, la diputada popular pidió a la Junta que "rectifique y aplique planes reales de austeridad de la función pública".