Según la calificación del ministerio público, a la que tuvo acceso Europa Press, el procesado, sobre las 06,00 horas del día 18 de julio de 2007, fue a una estación de servicio de la carretera Cabra-Lucena (Córdoba), donde tras amenazar con una navaja a la dependienta, se llevó 210 euros.

De igual modo, sobre las 11,00 horas del mismo día, en otra estación de servicio de la carretera Lucena-Loja, en la provincia de Córdoba, sacó de su pantalón un cuchillo de cocina, se lo puso en el vientre al empleado y se llevó 70 euros. Poco después, sobre las 17,00 horas, paró en otra gasolinera en la localidad de Cuevas de San Marcos (Málaga), donde igualmente amenazó con un cuchillo para llevarse 280 euros.

A las 02,30 horas del 19 de julio de 2007, cuando el acusado circulaba por la avenida de La Palmilla, en Málaga, fue dado el alto por agentes de la Policía Local y cuando iba a ser identificado, arrancó a gran velocidad, atropellando a uno de los policías y consiguiendo escapar.

De este modo, a las 07,30 horas, llegó a otra gasolinera en Iznájar (Córdoba), de donde también, sacando un cuchillo, se llevó 200 euros. El fiscal añade en su escrito que el acusado sufre dependencia a la cocaína y padece esquizofrenia paranoide, con síntomas alucinatorios.

Estos hechos son considerados por el fiscal como cuatro delitos de robo con violencia e intimidación y un delito de atentado a agentes de la autoridad por los que pide un total de 19 años y medio de prisión.