Revilla se pronunció así en respuesta a preguntas de le prensa sobre la oposición que despierta el proyecto en parte de la población castreña, una oposición que, según el presidente, es común a gran parte de los proyectos que se acometen desde las administraciones.

Según dijo, cuando se pone en marcha un proyecto en respuesta a una demanda ciudadana, como ocurre en este caso, hay después "un determinado número de personas" que "protestan", pero recalcó que en eso consiste gobernar, en "optar por lo mejor, intentar contentar al máximo posible de gente" y que el proyecto "redunde en beneficio del colectivo" al que se dirige.

En el caso del puerto de Castro Urdiales, Revilla se mostró convencido de que será así. De hecho, opinó que la construcción del puerto deportivo —que supone una inversión de 35 millones de euros sólo en la fase actualmente en licitación— es actualmente la inversión que puede tener más efecto multiplicador en el desarrollo del municipio.

En este sentido, Revilla apuntó que "el desarrollo de las ciudades turísticas va ligado siempre al desarrollo de un espacio portuario en el que conviven los barcos tradicionales de pesca, que cada vez son menos", con la náutica de recreo, y puso el ejemplo de las ciudades del Mediterráneo.

Además, resaltó que la construcción de esta instalación era "un clamor", lo mismo que hay demanda en otros puntos de Cantabria. De hecho, comentó que algunos alcaldes de la zona occidental de la región se "quejan" de que el Gobierno, en su apuesta por los puertos deportivos, se está volcando con el área oriental, una inclinación que Revilla achaca a la mayor demanda en esta zona.

El presidente señaló que el Gobierno tiene "claro" que este proyecto redundaría de forma "extraordinaria" en la imagen de Castro, dotando al municipio de un puerto deportivo como los de Laredo, Suances o San Vicente de la Barquera.

Por último, recordó también que el Parlamento regional aprobó por unanimidad una moción sobre la necesidad de ordenar ese espacio, una actuación que se verá además completada con el proyecto del parque Amestoy.

Parque amestoy

Precisamente, preguntado por la petición municipal para que parte de la explanada del parque se pueda utilizar como aparcamiento durante el verano, Revilla señaló que la petición está siendo analizada en la Consejería de Obras Públicas, Ordenación del Territorio, Vivienda y Urbanismo.

El presidente indicó que las obras siempre provocan molestias, pero destacó que se intenta causar "el menor número" posible. Por ello, si la petición del Ayuntamiento es "razonable" y se puede llevar a efecto, se hará. "Naturalmente. Lo que pretendemos es que este verano se originen los menores conflictos posibles a los ciudadanos", concluyó.