El Ayuntamiento de Palma prevé la creación de diez centros de día públicos hasta el año 2012, que supondrán un incremento de unas 300 plazas de estancia diurna. Concretamente, está previsto que a lo largo del próximo año entren en funcionamiento cinco nuevos centros y que queden, al menos construidos, otros cinco más, que estarían operativos a principios de 2012, según informaron hoy a Europa Press fuentes del Consistorio, que precisaron que estos diez centros supondrán un incremento de unas 300 plazas.

El teniente de alcaldesa y concejal del área de Bienestar Social, Participación Ciudadana y Cultura del Ayuntamiento de Palma, Eberhard Grosske, visitó esta mañana uno de los centros en construcción, y señaló que a principios de 2011 "se habrá duplicado el número de centros de día públicos en funcionamiento en Palma".

En la actualidad Palma cuenta con cinco centros de estas características, que son el de Bonanova, la calle Olmos, S'estel, Llar d'Ancians y Reina Sofia (que es mixto de titularidad pública y privada). Entre todos ellos suman entre 80 y 100 plazas de estancia diurna.

Así, las mismas fuentes detallaron que los cinco centros que se prevé que entren en funcionamiento el próximo año 2011 tendrán cada uno de ellos 30 plazas (el número estándar), por lo que sumarán un total de 150 más. Además, la intención de Cort es que en 2011 estén construidos otros cinco centros de treinta plazas también que entrarían en funcionamiento a principios de 2012 y que incrementarían la red de estancias diurnas públicas en 150 plazas más.

De esta manera, el número de plazas de estancia diurna públicas se situaría para principios de 2012 en casi 400.

Grosske señaló que la construcción de estos centros públicos se está llevando a cabo con la colaboración de la Conselleria de Asuntos Sociales, Promoción e Inmigración con el objetivo de dar un "cambio radical" a este servicio público. En este sentido, matizó que se trata de tema "sensible para la población", ya que el número de personas mayores cada vez es mayor y una parte de ellas están en situación de dependencia.

Además, Grosske subrayó que estos centros son "un buen recurso" para muchas familias porque les permite compatibilizar la vida laboral y familiar. En esta línea, agregó que "la falta" de centros de día público que tenía Palma era "sangrante" para las familias.

La consellera de Asuntos Sociales Promoción e Inmigración, Fina Santiago, quien también estuvo presente en la visita a las obras del centro de Son Rapinya, comentó que su departamento hizo una evaluación de las necesidades sociales que tenían las islas durante esta legislatura en la que se observó que los centros de estancia diurna eran el recurso "con menos presencia" en la comunidad.

Así, concretó que si lo recomendable es que hayan seis plazas en centros de día por cada cien personas mayores de 65 años, en Baleares no se llegaba ni al uno por ciento de esta cantidad. Por esta razón, apostilló que la apuesta de la Conselleria tenía que ir orientada a potenciar este servicio.

La consellera destacó también que estos centros permiten incidir en uno de los aspectos que promociona la Ley de Dependencia como es un servicio que compatibilice la atención especializada con la asistencia a las familias.

Santiago añadió que la Conselleria eligió a Palma como uno de los municipios "prioritarios" para la creación de los cuatro centros que hay ahora mismo en construcción porque es el núcleo urbano que, en proporción al número de habitantes, tiene menos plazas de estancia diurna en Baleares. Los otros centros se están realizando en estos momentos en Porreras, Valldemossa y Esporlas.

Centro de día son rapinya

El centro de día de Son Rapinya, cuyas obras se prevé que estén acabadas en agosto y entre en funcionamiento a finales de este año o principios del siguiente, tendrá treinta plazas repartidas en una superficie de 400 metros cuadrados. Allí, se ofrecerán "todo tipo de servicios" como los de fisioterapia, rehabilitación o de recuperación cognitiva, entre otros, así como el de hospedaje, indicó Santiago.

La consellera explicó que, desde que la Ley de Dependencia está en funcionamiento en las islas (agosto de 2007), se ha dado "trabajo estable" a unas 1.300 personas en la comunidad. En la construcción de este centro, concretamente, trabajan ocho personas.