La alcaldesa de Gijón, desvinculó hoy la convocatoria de gestión del Acuario con un posible desencanto del Ayuntamiento respecto a la actual empresa adjudicataria y matizó que obedecía a la finalización del contrato en vigor, que no puede ser prorrogado. Felgueroso indicó que ya se sabía que todo equipamiento en sus inicios iba a requerir del apoyo económico municipal, como pasa en otros acuarios, y enfatizó que Gijón está por debajo del ratio de otros que hay en España.

Asimismo, tras el acto de homenaje a las víctimas del Franquismo en el cementerio de Ceares, recordó que el contrato con la sociedad que actualmente gestiona el Acuario estaba unido a la construcción y puesta en marcha del equipamiento. No obstante, indicó que se sigue optando por un modelo de gestión a través "de sociedades terceras", aunque con algunas diferencias porque han pasado algunos años.

Pese a todo, dejó claro que no se pretende dar "un giro de 90 grados" y enfatizó que el Acuario ya cuenta con una plantilla de personas especializadas y con experiencia en este sentido. Asimismo, dijo confiar en que haya empresas interesadas en optar a la gestión de este equipamiento.

En este sentido, apuntó que los primeros años son siempre más complicados, al tener que configurar los espacios, formar al personal o dotarlo de contenido, aunque como contrapartida tienen más visitantes. La regidora señaló que en la nueva convocatoria se buscó el equilibrio de la concesión, porque si no nadie vendría a gestionar el Acuario.

También remarcó que el Acuario tiene un doble sentido desde siempre, por un lado, la sostenibilidad, y por otro como atractivo de la gente que viene de fuera para ver la ciudad. La regidora insistió en que ningún acuario es "autosuficiente" y en que las tarifas tendrían que ser más altas para que eso fuera así.

La alcaldesa señaló que no estamos ni en Madrid ni París, sino en una localidad en el Norte de España con una población que es lo que es y una capacidad de atracción que, a su juicio, es "mucha" para lo que es la ciudad. Por todo ello, sostuvo que seguirán apoyando al Acuario porque supone una calidad de vida para los ciudadanos y una enseñanza para los más pequeños y como atractivo de la ciudad.

Para ella, instalaciones como el Acuario o el Jardín Botánico cuestan dinero pero son elementos de atracción de visitantes a la ciudad y señaló que también los museos cuestan. A este respecto, abogó por buscar un equilibrio.