"Cada socio extranjero que viene de la mano de este Gobierno se convierte en una pérdida de dinero público de los cántabros", opina la secretaria general de la formación, Pilar de la Hera, para quien en la implantación de la yesera ha habido, además, "estafa y malversación de caudales públicos".

En un comunicado, subraya que "no es posible creer a un Gobierno que hace menos de un mes anunciaba para GFB las entrada de un grupo de inversores turcos y ucranos, y veinte días más tarde resulta que se ha aprobado la firma de un preacuerdo con el Grupo Sanford", según dice.

De la Hera hizo estas consideraciones en relación a la información del Consejo de Administración de Sodercan de esta semana, según la cual se ha autorizado la firma de un acuerdo no vinculante con un grupo inversor que ha presentado una oferta por la factoría para negociar las condiciones de la transmisión.

Además, la vicepresidenta cántabra, Dolores Gorostiaga, explicó ayer que las empresas interesadas en la planta de Orejo tienen de plazo hasta el 15 de abril para confirmar si persisten o no en su interés, según les ha comunicado la sociedad pública Sodercan. La también consejera de Empleo concretó que de las seis empresas que se habían interesado por el proyecto, cuatro han visitado las instalaciones de GFB y han mostrado su interés en la empresa.

Pero, para La Unión, "ni la conexión turca" ni el "oscurantismo de Sodercan con este nuevo grupo, hacen pensar nada bueno". Es más, a juicio de De la Hera "no debería haber nada que ocultar" puesto que no se trata de una "empresa privada" ni se está "jugando al espionaje industrial". Por ello, cree que Sodercan debe llevar esta negociación "con luz y taquígrafos, con controles máximos".

Indicios penales

Además, cree que en torno a la implantación de la yesera —que tilda de "completo desastre"— "existen más que indicios de ilícitos penales", según dijo.

"En La Unión cada vez tenemos más claro que las responsabilidades de GFB son gravísimas. Es más, pensamos y tenemos certezas de que hay indicios más que razonables de que en GFB ha habido estafa y malversación de caudales públicos", algo por lo que tendrá que "responder alguien", apostillan desde el partido.

Entre otras cuestiones, la formación critica que la empresa pública Sodercan "avala a GFB todos los préstamos suscritos con entidades privadas", a lo que se suma la cantidad de "20 millones de euros que puso Sodercan en la mesa como socio".

Huir hacia delante

Para de la Hera, el Gobierno de Miguel Ángel Revilla "sigue en su tónica general, de huir hacia delante y no afrontar los problemas". "Se van cumpliendo los plazos que han ido anunciando y lo único que está claro es que no han dicho ni una palabra de verdad", añade.

A su juicio, es evidente que "la consigna del Gobierno es no tener que dar cuentas del destino y de la perdida de más de 36 millones de euros de dinero público".

"Da miedo pensar lo que son capaces de hacer en este Gobierno con tal de no asumir las responsabilidades políticas y legales que hay en GFB. Son incluso capaces de atraer a Cantabria inversores que nos van a costar a los cántabros un Potosí, aún más de lo que ya hemos enterrado", que la dirigente de La Unión cifró en "más de 30 millones de euros".