El PSPV asegura que la asignatura de chino sólo sirve "para fotos de un instante" y que "no hay nada real ni sólido"

La portavoz socialista de Educación en las Corts Valencianes, Ana Noguera, aseguró hoy que la intención de la Generalitat de introducir el aprendizaje del chino mandarín en las colegios "sólo sirve para fotos de un instante y de cara a la galería". "Una vez más esta propuesta, como tantas otras, nos demuestra a los valencianos y valencianas que detrás de las iniciativas que anuncia el Consell no hay nada real ni sólido", indicó en un comunicado.

El grupo parlamentario socialista solicitará un informe que explique "el coste, el beneficio y la finalidad de este convenio, así como su utilidad para los alumnos valencianos" porque sostuvo que el presidente de la Generalitat valenciana, Francisco Camps, "juega con la buena voluntad de la ciudadanía".

Noguera se pronunció en estos términos después de que el conseller de Educación, Alejandro Font de Mora, informara ayer de la intención del Gobierno valenciano de incluir Inglés práctico, Empresa e iniciativa emprendedora, Profundización en el estudio de la geografía e historia de España e Introducción a la lengua y cultura china, en el catálogo de materias optativas en la Educación Secundario Obligatoria (ESO).

La diputada socialista afirmó que todas las iniciativas que emprende el Gobierno de Francisco Camps "son ridículas y demuestran el poco interés en profundizar y hacer algo serio". "No tienen intención de enseñar chino mandarín en nuestros centros escolares, sino simplemente lanzar cortinas de humo que desvíen la atención de los problemas que tiene el PPCV", comentó, al tiempo que destacó que se trata de una lengua "difícil y compleja".

Así mismo, reiteró que con la promesa de introducir este idioma en las escuelas valencianas, Francisco Camps y el Ejecutivo valenciano "engañan a los ciudadanos y ciudadanas". "Sólo participarán diez centros de los más de 2.500 entre públicos y concertados de la Comunidad Valenciana", es decir, el 0,4% del total, manifestó.

Sin embargo, incidió en que estos diez centros "sólo recibirán una semana de clase fuera del horario lectivo", es decir, el 1,4% de los días del año y se preguntó "de cuántas horas constarán esas clases".

En ese sentido, exigió al conseller de Educación, Alejandro Font de Mora, que informe de "cuánto nos ha costado este convenio" para poder introducir el chino en los centros y especificó que quiere conocer "qué se ha pagado; a cuánto salen las horas que se impartirán y qué aprenderán los alumnos con una semana de clase extraescolar". De esta manera, ha preguntado al conseller si realmente "esto es aprendizaje del chino" o "más bien nos está tomando el pelo a los ciudadanos y contribuyentes".

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