El alcalde no cree que Semana Santa sea momento para colocar pancartas por los vecinos de Alfaros

El Ayuntamiento respalda con 169.739 euros la actividad de las hermandades

El alcalde de Córdoba, Andrés Ocaña (IU), opinó hoy que la Semana Santa no es el momento adecuado para que los vecinos de la calle Alfaros, la cual es recorrido obligado de buena parte de las hermandades y cofradías con sus pasos, coloquen en la misma pancartas de protesta por las molestias que les causan el tráfico y los bares de copas en su calle.

En rueda de prensa, Ocaña argumentó que, "más allá de los legítimos derechos que pueden tener los ciudadanos a expresar su opinión, la Semana Santa no es el momento más oportuno para hacerlo porque, entre otras cosas, deberíamos ser respetuosas con quienes tienen el protagonismo en esos días, que son las hermandades y la propia Semana Santa".

El alcalde de la capital cordobesa, que insistió en que "no es el momento, ni es el lugar" para el desarrollo de dicha protesta vecinal, recordó que, en cualquier caso, "estamos en un país en el que el derecho a expresarse está garantizado y, por lo tanto, hay que respetarlo, lo cual no quiere decir que se esté de acuerdo", por parte del Consistorio, con esta acción de protesta dirigida contra el propio Ayuntamiento.

Ocaña hizo estas declaraciones poco después de firmar con el presidente de la Agrupación de Hermandades y Cofradías de Córdoba, Juan Villalba, la renovación del convenio anual de colaboración que tradicionalmente vienen suscribiendo la institución municipal y la entidad cofrade, no queriendo Villalba pronunciarse sobre la protesta vecinal, alegando que eso será "responsabilidad" de los propios vecinos.

Convenio de colaboración

En cuanto al convenio en sí, mediante el cual el Ayuntamiento apoya la actividad de las cofradías con 169.739 euros, Ocaña y Villalba detallaron que su objetivo es respaldar la celebración de la Semana Santa en Córdoba, desde la consideración que es "una fiesta" en la que participan de modo general los cordobeses, que está muy "enraizada en sus sentimientos y vivencias más íntimas", a lo que se suma que es una "importante manifestación religiosa", pero con unas dimensiones "social, cultural, festiva y turística que, en su conjunto, conforman una realidad de gran interés, tanto para el Ayuntamiento de Córdoba como para la propia ciudad", por lo que significa de promoción para ésta.

De hecho, según el alcalde, "puede haber lleno" en los hoteles de la ciudad la próxima Semana Santa, dado que esta "tradición popular" en Córdoba "cada vez tiene más proyección y resulta más atractiva" para los turistas, los cuales, según detalló por su parte Villalba, hacen que en Semana Santa "se tripliquen las pernoctaciones, respecto a la media de cualquier otro fin de semana del año", según un estudio de la propia Agrupación de Cofradías, que estima en 15 millones de euros los ingresos de la hostelería en Semana Santa, "sólo en la capital cordobesa", sin que ello, según lamentó, tenga ninguna repercusión en las hermandades.

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