Los editores subrayan que el diferencial de Contraseña respecto a otras editoriales pequeñas e independientes es "su ADN, su huella dactilar, es decir, el catálogo". "Confiamos en que dentro de un año aproximadamente hayamos conseguido dar forma a un catálogo que nos permita distinguirnos de otros", detallaron.

Por otra parte, Castán y Muñiz creen que otro aspecto va a diferenciar a Contraseña es el diseño de sus libros. "No es muy habitual que todos los libros de una editorial lleven en la cubierta una ilustración realizada ex profeso", argumentaron, poniendo como ejemplo la colaboración de ilustradores como Isidro Ferrer, Alberto Aragón, Elisa Arguilé, Jesús Cisneros y David Adiego.

Autores consagrados

Castán revela que la editorial no publicará la obra de escritores inéditos y que la idea es bucear en la producción literaria de escritores consagrados como James y Wharton. "Los libros que vamos a editar de esos autores no están al alcance del lector español y algunos de ellos nunca han sido publicados en nuestro país", detalla Muñiz.

Castán declara que inaugurar una editorial en plena crisis es "un acto de valentía" y argumenta que en Zaragoza "hay un grupo de personas entusiastas de la literatura, como libreros, escritores, periodistas, editores que hacen que nos sintamos muy bien acompañados".

"También es sede de algunas editoriales de prestigio de alcance nacional", añade Muñiz, quien cree que la posición entre Madrid y Barcelona "puede favorecer la difusión de la editorial".

Respecto a Huesca, los editores explican que la ciudad cuenta con "una amplia y variada actividad cultural" y que hay diversos escritores nacidos en la provincia de Huesca o afincados en ella, como Carlos Castán, Ismael Grasa, Óscar Sipán o Cristina Grande.