La transformación del parque Bilbao (Torrejón de Ardoz) de inhóspito descampado a florido vergel ha llegado acompañada de la polémica. El Ayuntamiento de la localidad ha optado por cerrarlo en horario nocturno, algo que no ha gustado a todos los vecinos ya que el cierre incluye también a la calle Bruselas, hasta ahora pública y peatonal.

"Estamos a favor de cerrar el parque por las noches, pero no la calle, que es nuestra por las escrituras y queremos que siga abierta", denuncia Trinidad Fernández, una de las vecinas afectadas y que ha presentado en el Consistorio más de 300 firmas para retirar el vallado de la calle Bruselas.

"El parque y la calle Bruselas se han convertido en propiedad privada para uso y disfrute de unos pocos, y no de la ciudadanía en general", denuncia también IU.

Medida antibotellón

Acabar con el vandalismo y la práctica del botellón en la zona son las razones que esgrime el Consistorio para defender el polémico cerramiento. "Los actos vandálicos se han reducido un 90%", aseguran fuentes municipales, que insisten en que el cierre del parque es "sólo nocturno" y que éste permanecerá abierto de 7.00 a 23.00 horas en invierno y dos horas más en verano.

Además, según el Ayuntamiento, el cierre del parque y de la calle Bruselas se ha realizado con el beneplácito de los vecinos y el voto favorable de los edificios afectados (seis portales en total de los 28 que conforman la urbanización).

Algo que parece corroborar la presidenta de la mancomunidad, Yolanda Menéndez, que asegura que el 80% de los propietarios afectados (120 residentes) han apoyado el cerramiento. "Antes era un descampado y estaba completamente abandonado", asegura.

Pero no todos opinan igual y varias terrazas de los afectados exhiben pancartas para que por la calle Bruselas se pueda volver a transitar.

El Residencial Avenida, cerrado

El Bilbao no sería el primer parque de Torrejón en cerrarse al público en horario nocturno. IU asegura que algo similar ocurre ya en el parque Residencial Avenida, donde, según dicen, el Consistorio invirtió 140.000 euros y ahora "permanece cerrado todo el día y los vecinos acceden desde dentro de la propia urbanización".