Desarticulada una red de explotación sexual de mujeres que pagaban su "deuda" en clubes de Salamanca y Portugal

Agentes de la Policía Nacional desarticularon, en colaboración con la Policía portuguesa, una red de explotación sexual de mujeres en clubes de alterne de la provincia de Salamanca tras la detención de nueve personas en España y una en Portugal.

Según informó el subdelegado del Gobierno en Salamanca, Jesús Málaga, los locales españoles en los que se produjeron los registros y en los que permanecían doce mujeres, de nacionalidad brasileña y rumana, son 'Paradise' y Tropical' en Fuentes de Oñoro (Salamanca). Además, se procedió al registro del domicilio de uno de los arrestados.

La red trasladaba a España mujeres procedentes de Brasil y del este de Europa a quienes se les imponía una "deuda" de 8.000 euros que debían saldar en clubes de Salamanca y del país luso, añadieron fuentes policiales.

La denuncia de tres mujeres que fueron desplazadas desde Brasil por los miembros de la red marcó el inicio de las pesquisas y los investigadores españoles averiguaron que los responsables del grupo desarrollaban también parte de sus actividades en Portugal, por lo que contactaron con los agentes lusos a través de los mecanismos de cooperación policial internacional.

La rama española de la red se encontraba asentada en la localidad de Fuentes de Oñoro (Salamanca), donde contaba con dos clubes para la explotación sexual aunque además el grupo tenía numerosos contactos en Brasil y Rumanía que facilitaban la captación de las víctimas, en su mayoría procedentes de dicho país sudamericano y del este de Europa.

Las mujeres eran dirigidas a los clubes a su llegada a España y la red les retiraba la "bolsa de viaje" (dinero en efectivo y una reserva hotelera) e inmediatamente les informaba de los supuestos gastos originados por su traslado a España.

"Esta deuda, del todo desmedida y abusiva, ascendía a 8.000 euros y se incrementaba cada día por una cantidad fija en concepto de comida y alojamiento", destacaron las mismas fuentes antes de referirse a las condiciones de "hacinamiento", con cuatro personas por habitación y con escasas medidas de higiene, en las que convivían las víctimas, quienes además eran "coaccionadas, amenazadas e incluso agredidas por los integrantes de la red".

Tras seis meses de investigaciones, los agentes pusieron en marcha un dispositivo junto a la Policía lusa que culminó con la detención de diez personas, una de ellas en Portugal, y el registro del domicilio del principal implicado y los clubes en Fuentes de Oñoro.

En dichos registros se intervinieron un arma simulada con cuatro bombonas de gas comprimido, una defensa eléctrica, cuatro sprays antiagresión, una llave de pugilato (puño americano), seis cartuchos del calibre 22, 1.500 euros, cuadrantes de control de pases y consumiciones de los clientes, justificantes de ingresos bancarios, billetes de avión, reservas de hotel y otra documentación.

La investigación fue desarrollada por agentes de la Ucrif de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras, la Ucrif de Valencia, la BPED de Salamanca, la Agencia Tributaria, la Policía Judicial y el Servicio de Extranjeros y Fronteras portugués.

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