La Guardia Civil de Valencia, dentro de los servicios que establecidos para la "inspección y control" de productos pirotécnicos en la campaña fallera de 2010, realizó ayer diversas actuaciones en distintos lugares de la provincia donde se incautaron de un total de 500 kilogramos de este material que incumplía la normativa para su tenencia o transporte.

Las intervenciones se realizaron en un kiosco de Pobla de Vallbona, que tenía almacenado más cantidad de la autorizada, una pirotecnia de Chelva por el mismo motivo, y un vehículo que transportaba este material sin autorización, según informó la Guardia Civil en un comunicado.

Los productos pirotécnicos intervenidos son de las Clases I, II y III, y por dicho motivo, la Guardia Civil confeccionó un acta de aprehensión y denuncia.